(De la redacción de DOBLE AMARILLA) El fútbol siguió atento el paquete de medidas que el ministro de Economía, Martín Guzman, anunciaba desde el Palacio de Hacienda minutos antes de que el “proyecto de Ley de Solidaridad y Reactivación Productiva” ingresara al Congreso de la Nación para ser tratadas el próximo jueves. Entre los temas más urgentes que el fútbol sigue muy de cerca están el impuesto a la compra de dólares y el cepo que desde hace un par de meses complica a los clubes que no sólo están imposibilitados a comprar divisas, sino que también están obligados a liquidar los dólares provenientes de venta de jugadores o del cobro de premios. Vayamos desglosando los anuncios de hoy y el impacto en la industria futbolera.

Dólar turista y dólar ahorro: el gobierno anunció que habrá un impuesto de 30% para todas las compras fuera del país ya sean pasajes o cualquier transporte en el exterior, hospedajes, servicios, cheques de viajero, extracciones en cajeros del exterior, etc. Quedan excluidos del impuesto gastos referidos a prestaciones de salud, compra de medicamentos, adquisición de libros en cualquier formato y utilización de plataformas educativas. También los gastos asociados a proyectos de investigación efectuados por investigadores. Mientras se creía que el impuesto iba a ser solamente a compras en el exterior, Guzmán confirmó que también pagarán el impuesto de 30% quienes compren dólar oficial para ahorrarlos ya sea en sus cuentas o bajo el colchón.   

Otra de las medidas que el Gobierno tomó fue ratificar el cepo cambiario impuesto por Mauricio Macri, que incluye la obligación de liquidar divisas en menos de una semana. ¿Cómo es esto? Los clubes hoy no pueden comprar los dólares que necesitan en el mercado oficial y además están obligados a vender al precio oficial todos los dólares que le ingresan (producto de premios y ventas en el exterior) en un plazo no mayor a 5 días, tal como lo dispuso en septiembre el Banco Central. ¿Qué quiere decir esto en la práctica? Pongamos un ejemplo. Si hoy a un club le ingresan u$s100.000, la institución está obligada a vender esos dólares al precio oficial durante esa misma semana. Al día de hoy (con una cotización de $63) sería un equivalente a $6.300.000. Pero si el club quiere pagar un viaje charter al exterior que cuesta u$s100.000 va a tener que pagar un impuesto de 30% sobre la cotización oficial. Entonces, para ese monto va a tener que desembolsar $8.190.000, es decir que debido a la obligación a liquidar divisas va a perder $1.890.000 entre una transacción y otra.

¿Qué hacen los clubes hoy para morigerar esta medida? Algunas instituciones para evitar liquidar los dólares empezaron a adelantar pagos de deuda. Es que la normativa sí permite cancelar con esos dólares deuda contraída, por ejemplo, con otros clubes. Hubo un club top del fútbol argentino que en el mes de octubre hizo al menos 2 operaciones con las que saldó anticipadamente deudas por pases con clubes del exterior. ¿Cómo hizo? El tesorero levantó el teléfono y habló con los clubes a los que tenían que abonarles cuotas que vencían el año próximo. Les ofreció pagarles anticipadamente a cambio de un descuento. Los clubes aceptaron y así el club no sólo evitó liquidar las divisas, sino que también generó una rebaja en la deuda. 

Esta medida del cepo es justamente una de la que más preocupa a los clubes, principalmente a los que aguantaban la venta de esos dólares especulando con una devaluación que les permitiera hacer frente a sus presupuestos. Hay clubes que con la venta de un jugador prácticamente saldan el pago de todos sus costos anuales. Seguramente, cuando se conforme la mesa de diálogo entre la industria del fútbol y el Gobierno es uno de los temas centrales junto al Decreto 1212. Hace no más de dos meses una delegación de Superliga se reunió con técnicos del Banco Central para pedir excepciones. Es más, acercaron una serie de alternativas a la normativa que había confeccionado el estudio Brochou que asesora a SAF. Sin embargo, en esa misma reunión, los técnicos que participaron llevaron el mensaje del entonces presidente del Banco Central, Guido Sandleris, de que ninguna excepción era posible y mucho menos para el fútbol.

Con esta medida, un nuevo dólar que puede acuñarse en esta industria es el “dólar futbolista”.  Hoy a los clubes se les hace cada vez más complicado retener a sus figuras. En los dos últimos años, la devaluación hizo prácticamente imposible mantener a los talentos ya que muchos clubes empezaron a aplicar topes a los contratos en dólares, lo que ahuyenta a los cracks que prefieren mercados mas previsibles. Las medidas anunciadas hoy, no hacen más que alejar aún más cualquier posibilidad de ver a las figuras jugando varias temporadas con la misma camiseta.

Hoy muchos jugadores tienen su contrato referenciado en dólares, pero los clubes el pago lo hacen en pesos. A eso hay que sumarle que la mayoría de esos vínculos tienen cláusulas que fijan el valor del dólar, con las que las instituciones se cubren de las grandes devaluaciones. Es por eso que hoy entre los jugadores top de los clubes grandes hay quienes tienen contratos con un dólar con tope en $60, $55, $50 y hasta hay contratos que quedaron retrasados y tienen un dólar a $35. A esto hay que agregarle un detalle no menor. Es probable que las nuevas medidas tengan un efecto casi inevitable sobre el dólar blue. Al mantenerse el cepo y al aplicar un impuesto de 30% al dólar turista y dólar ahorro, lo más probable es que el dólar blue se acerque o hasta supere al valor de estos dos. Es decir que no es difícil imaginar que el dólar que se consigue en las cuevas pase a costar en torno a los $82.

Si esto pasa los topes de los contratos de los jugadores no van a tener sentido. Un ejemplo, en algunos clubes hay jugadores estrella aún con topes de dólar a $35. Si un jugador tiene un sueldo de u$s 100.000 con tope a $35 el club le va a depositar $3.500.000. Pero cuando el jugador quiera ir a comprar dólares se los van a vender a $82 en el mercado negro. Es decir, que en lugar de tener u$s100.000 va a tener en mano unos u$s42.600, menos de la mitad de lo acordado por contrato. Este tipo de medidas va a generar dos cuestiones. Primero tensión entre los clubes y jugadores quienes van a pedir actualizar las cláusulas de los contratos. Y por otro lado, impulsará un mayor éxodo hacia mercados con monedas más fuertes. Pero no sólo hay que pensar en Europa, Asia, Brasil, México o USA. También hoy pasan a ser tentadores mercados como Chile, Uruguay, Colombia o Paraguay.

A todo esto hay que sumarle otro dolar de cabeza que le generó a los jugadores el cepo. Es sabido que los futbolistas suelen estar en la mira de AFIP, aunque en la época macrista hubo jugadores y principalmente representantes que parecían tener privilegios que el nuevo gobierno, aparentemente, está dispuesto a barrer.  Comprar dólar en el mercado negro en grandes cantidades no deja de ser un riesgo. Los contadores les advirtieron a los jugadores que por la brecha entre el dólar oficial y el blue, iban a tener complicaciones para cerrar sus declaraciones juradas. Es por eso que en los últimos meses, muchos futbolistas decidieron invertir en el mercado inmobiliario (departamentos, lotes y emprendimientos del pozo) y algunos menos conservadores apostaron al mercado de capitales comprando bonos. Es decir, hoy entre el cepo, los topes y una moneda tan devaluada hace que sea muy tentador emigrar a cualquier liga mediana.

Otro punto del anuncio tuvo que ver con las tarifas. El proyecto de Ley de Solidaridad Social y Reactivación Productiva congela las tarifas de electricidad y gas para todo el país hasta junio del 2020, interviene los Entes reguladores y ordena la devolución de la jurisdicción de las empresas Edesur y Edenor al ámbito de la Nación, y ya no dependerán a la Ciudad y Provincia de Buenos Aires. Esto es una medida buena principalmente para clubes con muchas actividades y con institutos educativos. 

¿Qué espera el fútbol? Esta semana hubo una primera reunión entre el Gobierno y el fútbol. Fue el lunes cuando el presidente, Alberto Fernández, recibió al titular de Conmebol, Alejandro Domínguez, para confirmarle que Argentina le dará al ente sudamericano una exención impositiva para la realización de la Copa América. De ese mismo encuentro participaron el presidente de AFA, Claudio Tapia; el ministro de Deportes y Turismo, Matías Lammens; y  el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, quien aspira a ser el nexo entre el fútbol y el Gobierno. Allí se habló también de la conformación de una mesa de la industria del fútbol. Según pudo saber Doble Amarilla, en las próximas dos semanas el fútbol será llamado desde la nueva AFIP, que conduce la economistas Mercedes Marcó Del Pont. Allí les darán a los dirigentes dos noticias. La primera es que van a ratificar que al menos por seis meses se prorroga tal como está el Decreto 1212, un beneficio que tiene los clubes en su régimen de aportes y contribuciones patronales. Pero también les dirán que, en ese plazo, se va a trabajar en la modificación de las alícuotas de ese beneficio debido a que hoy genera un fuerte desfinancimeinto al régimen de seguridad social. Los dirigentes apuestan a que el diálogo con este gobierno sea mucho más abierto que con el anterior y que se llegue a una negociación que no afecta aún más la inestable economía de los clubes, pero, ¿podrá el fútbol imponer condiciones en medio de un ajuste general para todos los sectores?