Boca protagonizó un verdadero escándalo pocas veces visto en la historia del fútbol sudamericano. Luego de quedar eliminado por dos goles dudosamente invalidados, se enfrentó con la delegación de Atlético Mineiro y con la propia policía de Brasil. ¿El problema? Dos de los tantos futbolistas registrados por las cámaras son Sebastián Villa y Cristian Pavón, ambos con causas judiciales por violencia de género. ¿Los hechos podrían agravar sus situaciones?

Según pudo averiguar Doble Amarilla con fuentes ligadas a los abogados que representan a las denunciantes, estudian utilizar estos hechos registrados en las cámaras como otra “prueba de conducta violenta y persistencia a pesar de la acción de la Justicia”.

Vale recordar que Villa y Pavón tienen causas diferentes y que incluso están en distintas instancias. Mientras que la del extremo colombiano ya se elevó a juicio oral a espera de una fecha concreta, el ex Selección Argentina debe aguardar las pruebas de los peritajes. Previamente, para que esto avance, también tiene que reactivarse la actividad judicial, algo que esperan los abogados de la denunciante.

Villa fue denunciado por su ex pareja, Daniela Cortés, en el marco de una causa por delitos de amenazas y lesiones leves. El pasado 30 de junio, la Cámara de Apelación y Garantías en lo Penal de Lomas de Zamora confirmó la elevación a juicio.

Villa había sido denunciado por primera vez el pasado 28 de abril de 2020 por Cortés, quien en ese momento era su pareja. La mujer también mostró en redes sociales imágenes que reflejaban que había sido golpeada por el jugador de Boca. Las primeras pericias indicaron que la mujer estuvo sometida a "un nivel alto de riesgo de violencia grave".

Sobre esta causa, fuentes le explicaron a Doble Amarilla que el incidente de este martes podría ser utilizado si es pedido como parte del contexto general de la causa, pero no se trata de una prueba en un expediente, y más sabiendo que la investigación formal ya está cerrada. Es decir, la defensa está en condiciones de peticionar la apertura de un expediente para agregar esta información, pero no es un indicio específico.

En cuanto a Pavón, la denuncia que le realizó Marisol Doyle es por “por abuso sexual con acceso carnal, tipificado en el artículo 119 del Código Penal”, ocurrido presuntamente en 2019 en una fiesta en el Valle de Anisacate, localidad de Córdoba.

En este caso, fuentes de la defensa prefirieron no emitir comentario, aunque aclararon que “es un momento crucial de la causa”. A fines de abril, la Fiscalía de Alta Gracia, a cargo del fiscal Alejandro Peralta Ottonello, autorizó al futbolista para que pueda viajar al exterior para los partidos de Copa Libertadores. En cada viaje, tiene que presentar la documentación necesaria para que no exista riesgo de fuga.

En cuanto a la causa en sí, tal como adelantó Doble Amarilla, la defensa de Doyle está muy conforme con la investigación de la fiscalía y sostiene que “se han realizado las pericias psicológicas” que “son fundamentales para continuar con el avance”. Lo que resta ahora son las conclusiones por parte de la Fiscalía de Alta Gracia, a fin de poder dictar algún tipo de resolución sobre el caso.

En el marco de la causa del ex delantero de los Ángeles Galaxy, desde la Fiscalía de Alta Gracia le manifestaron a este medio que estos antecedentes son pruebas que "eventualmente habrá que analizarlas", pero que "no sé advierte una relación entre los hechos" denunciados inicialmente.