(De la Redacción de DOBLE AMARILLA) El mundo del deporte sigue conmovido por el brutal asesinato de Daniel Correa Freitas, el futbolista de San Pablo de 24 años, que el 27 de octubre apareció casi decapitado y con los genitales extirpados. A los pocos días, la policía brasileña detuvo al principal sospechoso, Edison Brittes Júnior, quien confesó el crimen como un acto de defensa a su mujer, supuestamente abusada por Correa Freitas. Mientras el fiscal rechaza esta versión, ahora aparecieron nuevos y escalofriantes testimonios sobre lo que le hicieron al volante que se encontraba cedido a préstamo en el club Sao Bento. 

Según reveló el medio brasileño Globoesporte, el abogado del sospechoso Eduardo Henrique da Silva, de 19 años, señaló que su cliente y otras dos personas estuvieron con Edison Brittes durante el trayecto hasta el área rural en São José dos Pinhais donde fue encontrado el cuerpo de Daniel.

El abogado indica que en todo momento, el sospechoso del asesinato solo quería castrar al joven deportista pero que cambió de opinión luego de revisar el celular de Daniel Correa Freitas en donde encontró unos mensajes con las imágenes de su esposa durmiendo. 

"Fueron con el objetivo de asegurarlo, hacer la castración y dejarle a la intemperie para que buscase ayuda, pero no matarlo", dijo el abogado.

Pero Edison Brittes detuvo su vehículo, fue a la maletera donde estaba Correa y lo atacó con puñaladas en el cuello. Después de eso le cortó los genitales.