Actualmente, en las prácticas deportivas se implementan nuevos métodos que incluyen tecnología para tener datos contundentes sobre los desempeños de los jugadores o atletas. La neurociencia es, también, una forma de poder analizar el aspecto físico-mental y es uno de los nuevos paradigmas en los entrenamientos. Alan Reser, entrenador físico mental de deportistas dialogó con Doble Amarilla y contó detalles de, esta práctica, que se implementa hace aproximadamente 15 años.

Indica que, al ser una rama nueva y desconocida, deben utilizar conceptos que el jugador o atleta conozca. Apuntamos a que el deportista pueda tomar cada vez más decisiones eficientes, pueda cambiar decisiones de acuerdo a todas las variables que este juego tiene y que una lectura del juego pueda variar, percibir lo que lo rodea y que decida de manera eficiente y que dentro de esa variabilidad pueda resolver situaciones que se le presenten en el campo”, explicó.

Además, Reser destacó el caso de River, que trabaja desde un aspecto físico y mental. “Es un equipo que mentalmente nunca se cae, tiene apoyo y abordan el trabajo de manera integral, ahí marca una diferencia importante”, puntualizó.

- Doble Amarilla: ¿Cuánto hace que se aplica la neurociencia en el país y el deporte y de donde proviene?
- Alan Reser:
Hace aproximadamente unos 15 años que se aplica, yo me especializo en el tema desarrollado en el deporte, es un entrenamiento físico mental y proviene de Europa, desde España más precisamente. Se ubica en los nuevos paradigmas de entrenamientos de la neurociencia y la psicología deportiva y estamos en el medio de los dos grandes polos, porque también tiene una parte física muy importante.

- DA: ¿En qué beneficia la neurociencia al jugador de fútbol? ¿Es clave que el jugador entienda los por qué de cada movimiento o cosa que entrena?
- AR:
Eso, exactamente como vos decís. Hay cuatro eslabones de aprendizaje que tenemos en cuenta al momento del planificar y trabajar conceptos y técnicas nuevas, porque esto es un entrenamiento medianamente nuevo, entonces hay que generar conceptos para que el jugador entienda. El primero es la competencia inconsciente donde el jugador no sabe lo que hace ni sabe si está bien o mal, lo que sería el peor de los casos. El segundo sería la incompetencia consciente, donde al jugador no le sale el concepto que estamos trabajando, la destreza, pero igual ya sabe que está mal entonces de esa concientización del error nace el aprendizaje básicamente; el tercer eslabón sería la competencia consciente, donde el jugador ya domina un aspecto motriz, pero desde la conciencia. Se mentaliza y se prepara para que le salga bien, pone su atención ahí. El cuarto paso ya sería la competencia inconsciente, ya domina el tema, pero no se da cuenta lo que está haciendo, entonces el automatismo no está mal, sino que lo que está mal es no darse cuenta lo que hace. Tener automatizado un movimiento hace que el cerebro tome como factor principal una acción dominante del juego, como algo táctico o algo creativo, de imaginación entonces a ese dinamismo hay que solventarlo con ideas y no como principal factor poder dar un pase, por ejemplo, entonces de esa manera los roles en el cerebro van variando y ahí está el poder del aprendizaje del deportista en estos conceptos.

- DA: ¿En qué situaciones de juego ayuda a mejorar al jugador? ¿Pases, definición, visión periférica?
- AR:
Nosotros apuntamos a que el deportista pueda tomar cada vez más decisiones eficientes, pueda  cambiar decisiones de acuerdo a todas las variables que este juego tiene y que una lectura del juego pueda variar, percibir lo que lo rodea y que decida de manera eficiente y que dentro de esa variabilidad pueda resolver situaciones que se le presenten en el campo. Ante la variabilidad, que haya opciones y entonces le damos herramientas para potenciar todo eso, a nivel mental y cognitivo. Luego está lo anatómico y fisiológico del cerebro y desde ahí podemos hablar de una capacidad de respuesta, velocidad de procesamiento ante estímulos, que pueda procesar lo más rápido posible para también resolver de la misma forma y de manera eficiente a nivel motriz. En un campo de juego, un 80% de lo que sucede alrededor entra por la vista, por los ojos entonces cuanto mejor perciba lo que pasa alrededor, mayor será la respuesta de la ejecución motriz y menor el tiempo que tarda en resolver en esa situación de juego. En cuanto a la vista periférica, es en lo que más evidencia hay porque los ojos tienen músculos, entonces porque no entrenar la visión cuando el 80% de las cosas ingresan por esa vía, entonces en esta disciplina incluimos todos estos conceptos que son olvidados en el entrenamiento convencional, por así decirlo.

- DA: ¿Cuánto ayudó a la evolución de esta actividad el cambio en el fútbol a nivel mundial? ¿Había mucha reticencia antes?
- AR:
Por supuesto, pero tiene que ver con los avances del fútbol y de la psicología deportiva también, porque hoy se trabaja sobre mediciones claras en el fútbol y ahí también sabemos cuántos aciertos y errores hay, cuanto y como corrió la cancha y eso da un resultado, entonces con el nuevo paradigma de la neurociencia empezaron a creer un poco más. Hace 10 años atrás, ir a un psicólogo en este país era mirado de reojo, te miraban como si estabas loco o que te pasaba algo y hoy eso es mucho más convencido, entonces con todos estos avances también entendieron que lo mental también ingresa a los campos de juego. Por ejemplo, River tiene a Sandra Rossi en este sector de lo físico mental y es un equipo que mentalmente nunca se cae, tiene apoyo y abordan el trabajo de manera integral, ahí marca una diferencia importante.

- DA: ¿La no relajación de River cree que también se trabaja?
- AR:
A nivel de atención y concentración, muchísimo. Pensá que nosotros trabajamos con diferentes métodos y uno es la actividad multisensorial, donde el deportista recibe muchos estímulos, mucha variabilidad de los mismos y él tiene que resolver el problema tomando decisiones eficientes, a veces trabajamos con cinco estímulos a la vez entonces los niveles de atención y concentración pasan a ser muy alto, el deportista jamás pierde el foco.

- DA: ¿Qué te marcan los jugadores por lo general que han mejorado?
- AR:
Por ejemplo, Tomás Figueroa, arquero de Español, con un alto reflejo y una gran velocidad de respuesta tapó una pelota en el área chica un fin de semana y el jueves hablamos trabajado en eso, en resolver rápidamente algunas situaciones por ende eso lo ve más el deportista jugando que nosotros en un campo de juego, porque lo vivencia. Si un jugador tenía pensado hacer algo y alguna variable determinó que tenía que hacerlo de otra manera, se da cuenta que es algo que termina trabajando en estos programas, pero sí, me pasa bastante.