El médico clínico contratado para la internación domiciliaria en la que falleció Diego Armando Maradona fue imputado y citado a indagatoria en la causa por el fallecimiento del astro futbolístico. Los fiscales le reprochan haber visto al paciente en tan solo una oportunidad y no haber hecho un adecuado control clínico de salud, informaron fuentes judiciales.

Se trata de Pedro Di Spagna, médico clínico que había sido contratado para el seguimiento de Maradona en la casa de Tigre. Fue llamado a indagatoria para el próximo 20 de diciembre, acusado por el presunto “homicidio con dolo eventual” del ex-futbolista.

Los fiscales generales adjuntos de San Isidro, Cosme Iribarren y Patricio Ferrari, junto a su par de Benavídez, Laura Capra, ya habían procesado por “presunto homicidio con dolo eventual” al neurocirujano y médico de cabecera de Maradona, Leopoldo Luciano Luque (40); la psiquiatra Agustina Cosachov (36); el psicólogo Carlos Ángel “Charly” Díaz (29); la médica coordinadora, Nancy Edith Forlini (52); el coordinador de enfermeros Mariano Perroni (40); y los enfermeros Ricardo Omar Almirón (38) y Dahiana Gisela Madrid (37).

La figura penal prevé de 8 a 25 años de prisión y fue elegida por los fiscales tras una investigación en la que concluyeron que el equipo médico de Maradona fue "deficiente", "temerario" e "indiferente", ya que sabía que el 10 podía morirse y no hizo nada para evitarlo.