Cuando uno cumple años y principalmente cuando llega a un número "redondo", los festejos muchas veces trascienden lo común. Así lo hizo el entrenador Ricardo Caruso Lombardi, que tiró la casa por la ventana con una fiesta millonaria por sus 60 años que incluyó hasta políticos.

El mánager de Deportivo Español invitó en la exclusiva "Quinta Los Diez" ubicada en Villa de Mayo a 250 personas, entre las que estuvieron varias figuras del fútbol argentino y la política nacional. Entre ellos,  el Presidente de la Cámara de Diputados y ex presidente de Tigre, Sergio Tomás Massa, como parte de la mesa principal. 

El ingreso a la quinta

Si bien fue un evento fastuoso, varios invitados se vieron sorprendidos por el tenor de la fiesta que contó hasta con la presentación de 'El Show de Andy' y números de animación a lo largo de la noche. Algunos se preguntaron, inclusive, si la celebración no había sido pagada por Leonardo Cositorto, dueño de Generación Zoe, main sponsor del Deportivo Español donde Caruso es mánager. El DT afirmó que el empresario imputado por el fiscal federal Eduardo Taiano es su "amigo" y ''que todo lo que prometió en Español, lo cumplió".

El viernes por la tarde, el fiscal Taiano imputó a  Cositorto, fundador del holding Generación Zoe, por varios delitos penales, incluido el de estafa, a raíz de la denuncia de un particular afectado por la firma. Para la imputación, se ponderó también la información aportada por la Procuraduría de Criminalidad Económica y Lavado de Activos (Procelac).

En la demanda, se precisó que el negocio montado por Cositorto se dedica a “captar a jóvenes y adultos en situación de vulnerabilidad con promesas de obtener amplias riquezas sin tener que trabajar, tan solo invirtiendo u$s1000. Ofrecen ganancias superiores a los $100.000 mensuales sin hacer nada. Las víctimas que no tienen dinero son obligadas a captar a 5 o 10 víctimas que pongan el dinero solicitado para poder ingresar”.

Según el relato de algunos presentes en el evento, Cositorto estaba invitado pero no apareció. Dicen que la imputación lo obligó a bajar el perfil. No es el único problema para el empresario amigo de Caruso. Hace unos días, Data Clave publicó en exclusiva que Cositorto es investigado también por la DEA. La agencia antinarcóticos de los Estados Unidos viene monitoreando las actividades de Generación Zoe. Una fuente de la fuerza confirmó al medio que "siguen con mucha atención los cuantiosos movimientos de dinero, las ganancias millonarias y los recurrentes viajes a Panamá, Perú, Paraguay y Colombia" del empresario y su socio.

¿Fue su amigo Cositorto quien pagó la cuenta de la fastuosa fiesta de Caruso? La duda quedó entre muchos de los presentes.