Todo está como era entonces en la pistas, pero no tanto fuera de ellas. La vuelta a la actividad de la Fórmula 1 trajo la confirmación de la tendencia del último tiempo, pero una polémica enorme en los paddocks. El andar arrollador de Red Bull lejos está de ser acompañado por un clima de armonía puertas adentro del team austríaco. 

La denuncia que tuvo en el eje de las miradas al director del equipo, Christian Horner, por parte de una empleada, provocó un terremoto interno de gran escala. El gigante de las bebidas energizante contrató un abogado externo para que realizara la investigación, que duró ocho semanas, cuyo veredicto arrojó la desestimación de la denuncia, comunicada 24 horas antes del arranque de la temporada en Baréin. 

No obstante el ruido interno fue tanto que hasta Jos Verstappen, el padre del tricampeón Max, salió con fuertes declaraciones en contra de quien es uno de los grandes responsable del éxito en la campaña deportiva de Max. "Aquí hay tensión mientras él siga en su puesto”, disparó Jos, sin anestesia, en declaraciones al Daily Mail inglés. Pero no quedó en eso, el neerlandés, con pasado como piloto de F1, agregó: “El equipo corre el riesgo de desintegrarse. No puede seguir así. Explotará. Se hace la víctima, cuando es él quien causa los problemas"..

En las últimas horas el que tomó las riendas e intentó sembrar tranquilidad en torno a la continuidad de Max a bordo de la máquina con la que se volió ibatible es el propio Horner. El hombre fuerte del equipo se negó a pronunciarse sobre la petición de Jos de que dejar su puesto, diciendo que ambos habían hablado después de la carrera de Bahréin. Sin embargo, en ese momento los comentarios no se habían hecho públicos. "Obviamente estoy al tanto de los comentarios que se hicieron", dijo. "Hubo una discusión después de la carrera. Y creo que todo el mundo está muy centrado en el futuro".

Cuando se le preguntó si confiaba en que Verstappen se quedaría hasta el final del contrato, el director del equipo se mostró optimista. "Estoy seguro de que lo hará", dijo. "Tiene un gran equipo a su alrededor. Tiene mucha fe en ese equipo. Y hemos conseguido muchas cosas juntos. Así que se ha comprometido a un acuerdo hasta 2028. Y desde el punto de vista del equipo, desde el punto de vista de Max, estamos decididos a construir sobre el éxito que ya hemos logrado", detalló.

"Y sus 55 victorias han llegado en coches de Red Bull, todos los podios han llegado en coches de Red Bull Racing, y estamos decididos a construir sobre eso, y esperamos añadir muchos más en el futuro", añadió.