A quiénes responden los barras de Independiente detenidos: el trasfondo por la disputa de poder
El enfrentamiento armado entre las facciones violentas del Rojo tuvo varios detenidos y escenas de terror en pleno centro de Avellaneda. La emboscada del sector disidente y el por qué de una batalla histórica por el poder del paravalancha. Detalles.
El centro comercial de Avellaneda vivió horas de tensión por un enfrentamiento armado entre barras de Independiente que estuvo al borde de ser un baño de sangre. Persecuciones, detenidos y una emboscada por el poder del paravalancha a poco menos de una semana de la vuelta oficial del público a los estadios del fútbol argentino.
Como ya contó Doble Amarilla, hoy hubo un "combate" entre facciones de los violentos del Rojo. ¿Qué fue lo que ocurrió? El primer relato oficial mencionaba que ambos bandos se cruzaron en la sede del club, donde buscaban abonar la cuota social, ponerse al día y ser considerados como parte del 50% de aforo en el Libertadores de América.
Sin embargo, según pudo averiguar Doble Amarilla, la emboscada fue por parte del sector disidente denominado "Somos Nosotros", históricamente enfrentados con "Los Dueños de Avellaneda", la barra "oficial" de Independiente que había ido a la sede para poder hacer efectivo el reempadronamiento.
El enfrentamiento habría sido pergeñado por César "Loquillo" Rodríguez, jefe de la facción disidente del Rojo. En el conflicto entre los violentos, hubo golpes, corridas y hasta disparos con armas de fuego. Con la intervención de la Policía Bonaerense y otros efectivos de la Ciudad, se logró neutralizar la situación y se capturó a 19 violentos que quedaron a disposición de la Justicia. Se secuestraron armas, elementos contundentes y dos autos.
El "atentado" habría sido contra "Juani", heredero de Bebote Álvarez y líder de la barra brava oficial de Independiente. Bebote, hoy detenido, fue quien extorsionó a plena luz del día y en autopista a Ariel Holan en su etapa como DT del club. Además, una vez en prisión, involucró a los Moyano y dirigentes del club en una presunta red de asociación ilícita.
La disputa, más allá de la pelea histórica que tienen las facciones, tiene que ver con las internas que están teniendo gran parte de las barras internas de los clubes por la vuelta del público a los estadios. Como se sabe, solamente estará habilitado un 50% de público y tendrán exclusiva prioridad los socios que hayan pagado durante toda la pandemia y los que se pusieron al día con sus carnets.