El Comité Olímpico Internacional (COI) informó que los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 costaron un total de U$S 13.600 millones, de los que U$S 5.900 millones fueron con fondos propios y otros U$S 7.700 millones por las administraciones públicas. Sin embargo, lograron un superávit superior a los U$S 800 millones.

El director ejecutivo de los Juegos, Toshiro Muto, expuso el balance financiero final de los Juegos ante la asamblea del COI que se celebró este jueves en Pekín, donde el viernes se inauguran los Juegos de Invierno.

El comité organizador de Tokio 2020 cerró sus operaciones con un presupuesto equilibrado de U$S 5.900 millones. Muto subrayó el valor de lograr este equilibrio presupuestario "a pesar de la reducción de ingresos por la venta de entradas". Debido a la pandemia, los Juegos de Tokio, retrasados de 2020 a 2021, se disputaron sin público.

Junto a los U$S 5.900 millones aportados por el comité organizador, encargado de lo que se consideran gastos operativos, el gobierno de Japón destinó a los Juegos partidas por U$S 1.800 millones y el gobierno metropolitano de Tokio se gastó U$S 5.800 millones.

Según el contrato firmado por el COI y la ciudad sede, las autoridades locales, en este caso las del Área Metropolitana de Tokio, debían asumir el potencial déficit o gastos adicionales en los que incurriese el comité organizador. Muto destacó que, pese a las inversiones extra a las que obligó la covid, el gasto final estuvo por debajo de los U$S 15.400 millones que se calculaban antes de empezar los Juegos.

Por otra parte, el COI señaló que en 2021 ingresó más de U$S 4.161 millones y cerró el ejercicio con un superávit superior a los U$S 843 millones, tras unos gastos de U$S 906 millones.

Según las cuentas presentadas por el responsable de su comisión de finanzas, el singapurés Ser Miang Ng, a los ingresos de U$S 3.107 millones por la venta de los derechos de televisión en 2021 (1,0 en 2020) se sumaron otros U$S 835,6 millones procedentes del programa TOP de patrocinio (532 en el año previo), 39,7% de otros derechos y 178,9% de diversos ingresos cuyo origen no se especifica.

En el capítulo de gastos, la mayor partida liberada por el COI correspondió al reparto de fondos entre federaciones internacionales, comités olímpicos nacionales, asociaciones continentales y el comité olímpico de Estados Unidos (recibe un trato preferente), que ascendió a U$S 2.059 millones. Ng destacó que "en el último ciclo olímpico el 90 % de los ingresos fueron redistribuidos" entre los miembros de la familia olímpica.

A 31 de diciembre de 2021 el COI poseía unos activos de U$S 5.608 millones, de los cuales U$S 4.358 eran activos líquidos. El año 2020 se cerró con U$S 5.714 millones en activos.