Pasaron algunos días de la final del Mundial de Lituania 2021, donde la Selección Argentina cayó frente a Portugal por 2-1. Hoy, el joven entrenador, Matías Lucuix, habló en exclusiva con Doble Amarilla y valoró lo realizado. "No se pudo, pero nos quedamos satisfechos por lo que se hizo", aseveró.

- DOBLE AMARILLA: Ha pasado casi una semana de la caída en la final. ¿Qué análisis hacés del torneo? Y más allá del mundial, del proceso clasificatorio al mismo.

- MATÍAS LUCUIX: El análisis que realizo, principalmente, es positivo. Más allá de la tristeza por no haber podido conseguir el título, se pudo mantener en la élite a nuestra disciplina. Empezaremos a valorarlo con el tiempo seguramente y le daremos más importancia a este subcampeonato. Hoy todavía duele, está la rabia... la tristeza. El proceso mundialista, si uno lo ve desde la perspectiva de que volvimos a jugar una final del Mundo, es positiva. Más allá de que mantuvimos la base o la estructura de Colombia 2016, hubo jugadores jóvenes y nuevas incorporaciones. Se les dio la preparación justa para llegar con la mayor cantidad de vivencias posibles para jugar un Mundial. Ahora tenemos que volver a centrarnos en lo que viene. Hay jugadores que no podrán jugar el que viene y otros que sí, trabajaremos sobre eso y formaremos la mejor Selección posible.

- DA: Se lo consultamos a Alan Brandi antes de la final. ¿Qué diferencias hubo entre el Mundial 2016 y el que recién termina? ¿Sintieron la presión o la obligación de otro título?

- ML: No hubo una presión extra por ser campeones defensores. Tratamos de salir a jugar en todos los partidos de la misma manera, sin faltarnos el respeto a nosotros ni al rival. Fue entendiendo que individualmente no somos los mejores, pero colectivamente somos muy buenos. Y eso buscamos, no hay diferencia entre lo que pasó y lo que pasa. Esa es nuestra filosofía e identidad. Responsabilidad no, pero nosotros luchamos desde nuestro lugar. Desde cada partido para ser mejores y, desde ahí, tener la posibilidad de jugar para conseguir el título. No se pudo, pero nos quedamos satisfechos por lo que se hizo.

- DA: Tuviste un gesto que fue poco difundido. ¿Por qué regalaste tu medalla luego de la premiación? 

- ML: Fue un gesto que realmente no fue para las cámaras. Lucas (Tripodi) es un jugador que, por culpa de una lesión, no pudo estar con nosotros en el Mundial. Es un chico que estuvo en todo el proceso, siendo un jugador muy importante, y estuvo desde las semifinales con nosotros. Me salió del corazón, fue instintivo. Se lo merecía como muchos, estuvo apoyando y alentándonos como si fuese uno más.

- DA: De cara al futuro... ¿hay Lucuix para rato? ¿Qué le queda a una selección que viene de ser campeona y subcampeona mundial?

- ML: Por mi parte si. Estoy muy cómodo. Acepto el lugar de privilegio en el que estoy. Es algo importantísimo llegar a ser seleccionador. Estoy muy contento en mi país. Espero que si, pero no depende mucho de mí. Está claro que nos queda camino, nos queda no conformarnos, va a depender de la ambición, del recambio y de esfuerzos. Si nos creemos que somos los mejores, nos va a costar mucho. Tenemos que centrarnos en ser cada día mejores y repetir las felicidades momentáneas que te da el triunfo.

- DA: ¿Sos partidario de impulsar al futsal como deporte olímpico? ¿Qué opinión te merece que el futsal femenino no tenga un mundial? 

- ML: Claramente el futsal debería ser olímpico. Es atractivo, bonito. No depende de nosotros, sino de los organismos que rigen a nivel internacional. Esperemos que el día de mañana, más pronto que tarde, pueda ser olímpico y se disfrute en un torneo tan importante como los Juegos. A nivel femenino, merecen el reconocimiento. Estoy totalmente a favor. Depende de la FIFA que dé ese pasito para concretar un Mundial y darle crecimiento a nuestro deporte.

- DA: Se escuchó mucho durante el mundial la idea de qué pasaría si los jugadores de cancha jugaran al futsal. Reformulo esa idea: ¿Te ves dirigiendo en cancha grande?

- ML: No, no me llama la atención. Me gusta la disciplina, el futsal. Soy un amante de este deporte y un privilegiado en el lugar donde estoy. Si pienso algo en el futuro, es tener la oportunidad de dirigir en otra liga o en un equipo, pero siempre dentro del futsal.