(De la Redacción de DOBLE AMARILLA) La Recopa Sudamericana entre RiverAtlético Paranaense podría ser postergada para agosto por la Conmebol para evitar entregar el trofeo en un estadio vacío, ya que el Monumental fue sancionado con dos partidos a puertas cerradas tras los incidentes en la final ante Boca y en ese entonces ya estaría cumplida la pena.

El calendario 2019 publicado por el propio organismo afirma que la ida, a jugarse en Curitiba (la casa del campeón de la Sudamericana), sería el 20 de febrero, mientras que la revancha, con el ganador de la Libertadores como local, se disputaría el 6 de marzo.

También hay que decir que está en curso un pedido de reducción de sanción que hizo River a través de su departamento de legales. En caso de que hagan lugar al pedido del Millo, la pena podría ser reducida de dos a una fecha sin público.

De esta forma, la Conmebol intenta acomodar el calendario para no tener una entrega de premios a cancha vacía en el Monumental. 

A su vez, el cronograma también baraja otra opción que es la de la final única en un lugar neutral. El presidente de de la entidad sudamericana, Alejandro Domínguez lleva adelante personalmente las negociaciones para que la Recopa se juegue a final única fuera de nuestro continente.

No obstante, la decisión sobre el destino de la Recopa está sujeta a lo que pueda negociar Domínguez con Qatar (lugar donde se jugaría la finalísima) u otra sede en el exterior. Es decir, primero se agotarán las instancias de la negociación y recién después se aplicará el "plan B" de jugar las dos finales ida y vuelta.

Otro tema a tener en cuenta es que el costo político de volver a sacar un torneo sudamericano fuera del continente es muy alto. La final de la Libertadores tuvo una muy buena recepción en todo el mundo, pero no en Sudámerica donde la medida se calificó de impopular. La idea es que no haya una coronación a cancha vacía. ¿Habrá otro cambio más en los papeles de la desorganizada Conmebol de los últimos tiempos?