Esta primera novela llegó a su fin y con felicidad para todas las partes: Wanchope Ábila cerró su llegada a Colón de Santa Fe y jugará tanto los torneos locales como la Copa Libertadores con el equipo que dirige Julio César Falcioni y le deja a Boca una buena suma de dólares para un delantero que el Xeneize no tenía en cuenta para su plantel. 

José Vignatti, presidente del Sabalero, estaba decidido a quedarse con el delantero, sin resignar -al menos por ahora- a Facundo Farías, pretendido por Boca. Sabiendo que Wanchope no era prioridad para Boca, Colón ofertó y se queda con el 9 que tanto pedía Falcioni: US$ 1.650.000 por el 100% del pase y firmará por los próximos tres años con el club hasta 2024.

Wanchope no tenía retorno en su relación con el Consejo de Fúbol de Boca y particularmente con el vicepresidente del club, Juan Román Riquelme: de hecho a fines de la semana pasada tiró munición pesada contra ellos, donde aduce el jugador falta de comunicación por parte de la CD, y fue el propio Román quien le contestó horas más tarde, en un rally mediático con frases picantes sobre el pasado y presente del goleador.

Como paradoja del destino, el debut del equipo es ante el mismo Boca y en la Bombonera. ¿Estará Wanchope al menos en el banco? ¿Cómo será recibido por la gente? Lo más probable es que en Santa Fe organicen una puesta a punto y que el 9 dilate el estreno con su nuevo club.

Ramón Ábila llegó a Boca en diciembre de 2017, jugó 86 partidos y convirtió 13 goles. En marzo del año pasado se fue a la MLS, donde jugó en Minessota United y DC United.

Esta mañana Ramón Ábila estuvo en el predio de Ezeiza y se despidió de sus compañeros para tomar rumbo hacia Santa Fe, donde se reencontrará con Julio César Falcioni y comenzará a escribir otra historia.