El gol de Darío Benedetto no solo confirmó el gran momento de Boca, con cinco victorias al hilo y la punta parcial del torneo (a la espera de los resultados de Gimnasia y Atlético Tucumán). También ese tanto, sobre el final del encuentro en el Néstor Díaz Pérez, fue un puñal que se clavó de lleno en cada hincha de Lanús. Y se desató la furia.

El 'Grana' marcha último en el torneo,con tan solo once unidades, con un balance bastante pobre. Dos victorias, cinco empates y doce derrotas, es el saldo que hasta ahora arroja la alrmante campaña de Lanús. Además, ganó tan solo uno de los últimos 18 encuentros que disputó (ante Arsenal, por la mínima). También es el peor conjunto de los 28 equipos de la Liga Profesional de Fútbol en la tabla anual. Y los promedios empiezan a preocupar.

En la noche de la 'Fortaleza', y tras el gol de 'Pipa', comenzaron los cantos amenazantes. Los primeros apuntados fueron los propios futbolistas de la institución del Sur. El "Jugadores, jugadores no se lo decimos más, si nos mandan al descenso que quilombo se va armar", tronó con fuerza. Luego llegó el turno de los dirigentes, a quienes la hinchada "atendió" con el clásico "que se vayan todos, que no quede uno solo". Fue el preludio de lo que pasaría en las afueras del estadio después.

En la previa al encuentro con el 'Xeneize' ya había habido inconvenientes, luego de la derrota ante Barracas Central los hinchas se autoconvocaron en el Estadio y se pusieron de cara al plantel para protestarle por el momento del equipo. La escena se repitió en los pasillos de Néstor Díaz Pérez en la noche de anoche. Incluso varios se pusieron frente a frente con los dirigentes 'Granates', y hubo escenas de tensión.

Todo este escenario se da, ni más ni menos, que en la previa al clásico de la fecha 20 ante Banfield. Lanús necesitará la victoria para tener un impulso anímico para cerrar un año que a todas luces es pésimo. El escenario de una derrota es preocupante, porque detonaría (aún más) la olvidable temporada por la que pasa la institución 'Grana'.