Enojado, decepcionado y cabizbajo. Quizás con esas tres palabras se puede definir el estado de ánimo con el que el entrenador de River, Martín Demichelis, se retiró del Estadio Malvinas Argentinas de la provincia de Mendoza luego de la durísima derrota que sufrió su equipo ante Independiente Rivadavia por 4-0.

El director técnico del ‘Millonario’ tenía un gesto adusto cuando dejó las instalaciones del reducto mendocino, luego de lo que fue la actuación de una formación con mayoría de futbolistas suplentes. Algo que también utilizó la “Lepra” para esta presentación que finalizó con un abultado resultado en contra.

Hasta el punto llegó el fastidio del ex futbolista de Bayern Munich, entre otros, que en un inusual gesto decidió no tener contacto con la prensa luego de transcurrido el encuentro. Más allá de eso, pudo recibir el cariño de algunos hinchas que se habían agrupado en las afueras del estadio.

Uno de ellos incluso le expresó: "Micho es un amistoso nomás, cabeza arriba", desde el otro lado de las vallas de contención que había montado el operativo de seguridad. El director técnico solo atinó a contestarle levantándole la mano y saludando, más allá de que la expresión de su rostro expresaba todo lo contrario, al igual que la de su Cuerpo Técnico.

A las 00:45 de este sábado el plantel ‘Millonario’ partió en un vuelo hacia Buenos Aires con la sensación de que muchos de sus futbolistas no aprovecharon la oportunidad de poder mostrarse en el encuentro ante Independiente Rivadavia, y con la sensación de tener mucho que trabajar de cara a lo que será la recta final de la Copa de la Liga y el inicio de la participación de River en la Copa Libertadores.