Buenas noticias para Insúa, quien pedía una incorporación en la defensa, algo que San Lorenzo de Almagro no podía hacer hasta hoy. Sobre las últimas horas de la jornada, las autoridades del “Ciclón” levantaron oficialmente la inhibición que pesaba sobre el club por parte del futbolista uruguayo Diego Rodríguez. El ex Independiente se sumó a “Boedo” tras su paso por Tijuana de México. 

El acuerdo fue que había que abonar USD 500.000, suma que se iba a cancelar por la finalización del préstamo de “Uvita” Fernández, quien tuvo que regresar antes de tiempo a Defensa y Justicia.

Sin embargo, eso nunca ocurrió hasta hoy. El reclamo se elevó a FIFA y allí intervino el TAS. En caso de no completar la totalidad del pago o de acordar un nuevo plan, el equipo dirigido por Rubén Insúa iba a quedar inhibido por este mercado de pases y por los dos siguientes. Tanto los dirigentes de la institución como el “Torito” tenían un acuerdo de palabra, desde principios de este mes.

San Lorenzo recibió el visto bueno del Banco Central para girar el dinero para abonar la mitad de la deuda existente se levantó la prohibición que había dispuesto el TAS y se firmó un plan de pagos para el resto de la deuda con quien vistió la camiseta ‘Azulgrana’ a principios de 2020 y se marchó libre por falta de pago en agosto de 2021. 

Además, cabe recordar que en estos días también el club de Boedo hizo efectiva una de las cuotas del pase de Adam Bareiro al Monterrey de México.

Ahora, las autoridades trabajan a contrarreloj para cerrar un defensor y satisfacer el pedido de Ruben Insúa. En ese sentido, intentan acordar la contratación de un nombre que viene sonando desde antes que el uruguayo Rodríguez imponga la inhibición: hablamos de Fabricio Formiliano. El zaguero uruguayo, de 30 años, viene de quedar libre del Necaxa de México y podría convertirse en refuerzo en las próximas horas.