Rosario Central fue el único equipo femenino del interior que participó del primer torneo profesional de AFA. Desde la entidad ‘canalla’ hay un compromiso por el crecimiento del deporte y se realizan ciertas intervenciones para que esto suceda. Roxana Vallejos, entrenadora del equipo femenino, dialogó con Doble Amarilla y contó cómo realizan el seguimiento a las jugadoras. Si bien comentó que no todas tienen los recursos para poder realizar las prácticas a través de ‘Zoom’, desde el cuerpo técnico buscaron alternativas para que todas continúen en movimiento y enfocadas pensando en los próximos compromisos del fútbol femenino.

Además, destacó que se encuentran pendientes del estado anímico de las jugadoras. “Las reuniones por ‘Zoom’ las hacemos una vez a la semana o cada dos semanas con la que puede, para llevar un acercamiento más real, que sientan que estamos, pero el contacto es diario, por whatsapp, es individual para saber cómo la vienen llevando”, destacó.

En tanto, resaltó la importancia de contar con equipos de Reserva para el crecimiento y el desarrollo de la disciplina. Comentó, además, que en Central ya se encuentran trabajando con Divisiones Inferiores y destacó que “debería pasar en todos los clubes porque es parte del crecimiento del fútbol femenino”.

Por otro lado, se refirió al nuevo método de entrenamiento que se encuentran implementando con el cuerpo técnico de Rosario Central, en función de los ciclos menstruales de las futbolistas. “Estamos trabajando con mujeres y debemos contemplar esos cambios que hay en la mujer, afecten o no. Creo que sí tiene que ver, porque a raíz de eso pudimos evaluar y disminuir lesiones, sacar un poco el tabú del miedo o prejuicio de preguntar y poder llevar un buen estudio para ellas”, detalló.

- Doble Amarilla: Primero que nada, ¿cómo estás pasando esta cuarentena?
- Roxana Vallejos:
Estoy cerca de mi familia, así que aprovechando el tiempo que tenemos, que a veces es algo que tenemos que resignar por esta profesión, en la que me toca estar más lejos. Disfrutando del momento y cuidándome, hasta que no pase todo, no tengo intenciones de salir porque esto que está pasando es terrible.

- DA: En el fútbol también repercutió porque se suspendió el torneo y luego se finalizó.
- RV:
Sí, es algo a lo que nos tenemos que acostumbrar. No solo pasó acá en Argentina, sino también a nivel mundial, así que hay que acostumbrarse y tener la paciencia para esperar que llegue el momento para poder retomar las actividades. Sin las seguridades mínimas estamos muy complicados para el retorno, pero se extraña muchísimo.

-  DA: ¿Se extraña el día a día?
- RV:
Sí, sí. Es el cable a tierra para los amantes del fútbol estar en una cancha o poder practicar el deporte. 

- DA: ¿Cómo se encuentran trabajando con las chicas?
- RV:
Ellas tienen desde el primer día de cuarentena el trabajo del profe. Van realizando los ejercicios de acuerdo al tiempo que tengan durante el día. Para controlar eso lo que hacemos es mandarle una planilla para que puedan ir completando, para saber cómo se sintieron, qué tipo de dolor tienen… De esa manera realizamos el seguimiento. Intentamos varias veces utilizar ‘Zoom’, pero para el entrenamiento lo vemos bastante complicado coordinarlo, sobre todo porque no todas lo conocían y no todas tienen la posibilidad de poder conectarse porque no tienen los medios o los recursos y por eso se buscó la alternativa. Aún así, por medio de whatsapp sí nos comunicamos, les pedimos videos para saber cómo están ejecutando los ejercicios.

- DA: ¿De qué otra manera realizan trabajos con las jugadoras?
- RV:
También aprovechamos, por ejemplo, después de haber pasado la primera parte de la cuarentena, y les pasamos trabajos prácticos para distender, que se mantengan ocupadas en algo y bajar un poco la ansiedad. Creo que, más allá de todos los trabajos que nosotros podamos bajar como profesionales, hay una realidad mucho más superadora en este momento que es la humana, de las necesidades que ellas están pasando en este momento, entonces por momentos toda esta parte de entrenamiento quedan un poco al costado y nos preocupamos sobre si están comiendo bien, si tienen para comer, lo que necesiten: asistencia médica, contención, tanto sobre la parte psicológica, porque las realidades son diversas y tenemos que estar en este momento acompañándolas de la mejor manera para que puedan transitar y hacer todo esto más llevadero.

- DA: ¿Y cómo las notas en el sentido anímico? Quizás al principio de la cuarentena se afrontaba de distinta manera en relación con cómo se encuentran ahora con tanto tiempo en el medio.
- RV:
Pensábamos que eran dos semanas y cuando se iba extendiendo la ansiedad iba creciendo más. Después de la ansiedad se pasa a momentos de depresión porque no tener un objetivo próximo hace que todo sea más incierto. Pero con la comunicación entre nosotros, ir hablando, ir proyectando, preparándonos para lo que viene es como el eje para mantenerlas activas e interesadas. Las reuniones por ‘Zoom’ las hacemos una vez a la semana o cada dos semanas con la que puede, para llevar un acercamiento más real, que sientan que estamos, pero el contacto es diario, por whatsapp, es individual para saber cómo la vienen llevando. La comunicación pasó a ser de global a más individual porque cada una vive una realidad totalmente diferente. El fútbol femenino es así, no tienen las posibilidades que tienen los del masculino.

- DA: En el encuentro que hizo AFA un tiempo atrás sobre el fútbol femenino, se informó que los clubes deberán tener un equipo de Reserva, ¿qué opinas de esto?
- RV:
Me parece bárbaro que sea obligatorio contar con un equipo de Reserva. Nosotros, ni bien nos habían comunicado al inicio del torneo de la posibilidad de poder contar de lo que es la estructura de Rosario Central, que ya viene trabajando desde hace años con otras divisiones, con lo cual ya estábamos preparados y fue muy beneficioso para nosotros porque se notó en el campeonato de Reserva que las jugadoras estaban bien en el sentido de la competencia, ya tenían el roce que necesitaban y por lo tanto nos fue bastante bien con la Reserva. Creo que es algo necesario, empezar a fomentar las Divisiones Inferiores en todos los clubes. Nosotros hoy podemos contar con una estructura desde Sub8 en adelante, que es la manera en la que nos estábamos organizando: Sub10, Sub 12, Sub14, Sub16. Después tenemos dos equipos de Primera División, en la Liga Rosarina, Reserva y AFA. A nivel estructural nosotros estamos muy bien, contamos con alrededor de 140 jugadoras aproximadamente en lo que es la estructura del club y eso nos beneficia. Debería pasar en todos los clubes porque es parte del crecimiento del fútbol femenino. Para mí es una muy buena noticia y ojalá se vaya fomentando cada vez más la participación de más categorías.

- DA: ¿Cómo es la participación de la dirigencia de Central en el desarrollo del fútbol femenino?
- RV:
Se encuentran totalmente comprometidos. Lo que es la solicitud para la participación en el torneo estuvo desde siempre, porque siempre hubo equipo. Por ahí había una especie de negación por parte de AFA por cuestiones de que los demás equipos no estaban preparados para poder solventar los gastos de traslado, entonces fue complicado por ese lado. Con esto de la semiprofesionalización pudimos entrar, participar y estar en este torneo que bien nos hace, porque va a crecer a medida que tengamos más incorporaciones de equipos, ya sea en Primera, Reserva o en Inferiores. Esto debería ser el proyecto para poder tener mejores oportunidades futbolísticas las mujeres y para potenciar la Selección Nacional. 

- DA: Además, la importancia de la participación de Rosario Central en el torneo tiene que ver no sólo con lo deportivo, sino con la visibilización de los clubes del interior.
- RV:
Por supuesto. Conocemos el caso de Belgrano de Córdoba que tiene buen equipo, Talleres también… En Santa Fe está Unión. Hay equipos en todo el país. Lo que pasa es que hay que empezar a dar oportunidades, que las estructuras de los clubes les empiecen a dar más apoyo y contención, participación y compromiso porque si no se hace todo más cuesta arriba. Creo que tenemos que empezar a buscar y armarnos de recursos para poder participar, porque en algún momento esto va a ser obligatorio, como lo fue la bajada de FIFA y Conmebol de que para participar en torneos los clubes debían tener equipos femeninos activos. Hoy nos toca a nosotros en el femenino la obligación de tener Reserva y así va a ser una cadena que en algún momento todos los clubes van a tener que estar participando. Es cuestión de no perder tiempo y poner manos a la obra para que esto se dé.

- DA: ¿Cómo fue el torneo para ustedes? Tuvieron que realizar muchos viajes hacia Buenos Aires.
- RV:
Hubo mucho sacrificio, y nosotras más todavía que los equipos de Buenos Aires. Al ser el único equipo del interior, estuvimos viajando muchas fechas que los demás, pero sabíamos que iba a ser así. Apostamos a eso y nos fue bastante bien. La organización estuvo muy bien por parte de Central, tenemos todos los recursos y los medios para poder hacerlo, así que no fue un inconveniente o un impedimento para poder competir. Es algo que nos sirvió para ir creciendo cada vez más y que, con el tiempo, vamos a ir aceitando en lo que respecta a concentraciones y cómo desarrollamos el día de viaje. No tendría que ser un impedimento en la competencia.

- DA: ¿Qué balance haces del primer torneo profesional del que participó Central, cumplieron los objetivos que se plantearon al principio?
- RV:
Sí, totalmente, de principio a fin. Es un equipo nuevo que venía de jugar una Liga, más allá de que habían ganado muchas competencias a nivel local, el desafío era más grande, no solo por la competencia sino por pasar de ser amateurs a profesionales. Creo que pudimos dar pelea a muchos equipos con varios grandes también, de años de trayectorias, y con otros que nos llevan años de ventaja y pudimos ser muy superiores. Sorprendimos a varios y muchos no creían de lo que podíamos llegar a hacer dentro del torneo. Cumplimos con las expectativas, que era quedar dentro de los ocho, más allá de que se haya suspendido, todo lo logrado hasta la última fecha fue muy positivo. Estamos en un proceso y fue bueno, estamos contentas y aspiramos a más.

- DA: Ahora queda seguir entrenando hasta que se conozcan novedades sobre el próximo torneo.
- RV:
Sí, lógico. Ahora se vienen otros cambios interesantes como la apertura de los fichajes, donde vamos a poder tener incorporaciones nuevas, volver a mezclar y dar de nuevo. Vamos a ver cómo nos organizamos para seguir focalizados a estar dentro de la Zona Campeonato, de poder pelear la punta e ir siempre por más.

- DA: Sé que están trabajando desde una perspectiva de género, ¿cómo son las planificaciones de entrenamientos, de acuerdo a los ciclos menstruales de las jugadoras?
- RV: Creemos que es algo fundamental. Es una parte desconocida en la mayoría de los planteles, pero fundamental. Estamos trabajando con mujeres y debemos contemplar esos cambios que hay en la mujer, afecten o no. Creo que sí tiene que ver, porque a raíz de eso pudimos evaluar y disminuir lesiones, sacar un poco el tabú del miedo o prejuicio de preguntar y poder llevar un buen estudio para ellas. Se sienten más contenidas, con un poco más de seguridad ante esto, porque no siempre se está con las mismas fuerzas, todo depende del ciclo y en todo lo que podamos apoyarlas y potenciarlas a las jugadoras lo vamos a hacer, en pos de que se desarrollen en el deporte lo mejor posible.

- DA: ¿Cómo lo tomaron las jugadoras?
- RV:
Bien, bien. Nosotros siempre respetamos a la que quiera dar o no los datos para darle seguimiento a los entrenamientos. Todas estuvieron predispuestas, tienen unas ganas enormes y lo pudieron adaptar muy bien. Durante el ciclo de las jugadoras se entrena, contemplando ciertos esfuerzos. Conociendo y teniendo los parámetros de cada jugadora, podemos adecuarnos mejor a los entrenamientos y no se pierden de nada, pueden estar siendo partícipes y es lo que queríamos lograr.

- DA: ¿Cómo se decidió tomar este modelo?
- RV:
Es algo que me da curiosidad desde hace tiempo. Escuché en un momento que Estados Unidos a nivel Selección lo estaba implementando con diferentes métodos, un poco más invasivos por ahí, y le propuse a mi profe, que también tenía esa curiosidad. Me preguntó: “¿Vos considerás importante el ciclo menstrual en la mujer?”, nos pusimos a hablar y a debatir. Le dije que me encantaría poder hacer un entrenamiento más específico y adecuado a eso, para ver si hay cambios. Yo, como mujer y ex jugadora lo he vivido y entonces tras mi experiencia creía que era fundamental poder trabajarlo. Él se puso a investigar, el cuerpo médico también buscó información que pudiéramos recolectar y no había mucho. Por eso empezamos a hacer las bases nosotros desde lo mínimo hasta lo que más se pudiera considerar para dejar registros, porque en muchos lugares es tabú o hay muchísima desinformación, no solamente de parte de jugadoras sino de cuerpos técnicos… Hay que poder tomarse el tiempo de poder investigar, aprender, ver y aplicarlo en los entrenamientos es todo lo que nosotros intentamos buscar para poder implementar. Con el profe y el cuerpo médico nos pusimos a investigar en seguida porque también necesitábamos del aporte de ellos para poder resolver un montón de cuestiones.