Pese a la advertencia de River se produjeron incidentes previo al Superclásico, frente a Boca, en los accesos del Monumental que dejó un saldo de 18 detenidos por desobediencia y 3 sin entradas, 2 policías heridos, dentro de la cuales una estaba embarazada.

A través de un comunicado oficial, River informó que accedieron al Monumental cerca de 70.000 hinchas en un operativo que contó con 1.264 policías, 900 vigiladores privados de TECH, 533 controles de UTEDyC y 235 molinetes de control de ingreso al Estadio a nivel perimetral y de puertas.

A pesar de este despliegue de personal y recursos, se registraron incidentes en los molinetes perimetrales ubicados en la calle Udaondo, a la altura de la estación de servicio Shell, cuando un grupo de personas intentó pasar por la fuerza ese control y acceder a las puertas del Estadio. De ese grupo, la mayoría pudo ser contenida por personal policial (algunos quedaron detenidos), mientras que otros llegaron hasta la puerta U de Tribuna Belgrano, que fue cerrada para evitar el ingreso de personas sin entradas al Estadio.

Tal como anticiparon a través de otro comunicado emitido previo al encuentro, aquellos socios y miembros de Somos River que intentaron ingresar al Monumental sin abono (TLM) ni entradas, afectando el normal ingreso al partido de los que sí estaban habilitados, serán sancionados y se les prohibirá el acceso al Club y al Monumental por seis meses. Asimismo se procederá a suspender por un año a los socios y miembros de Somos River que sean identificados -a través de las cámaras del sistema de control y vigilancia del Club- como responsables de los incidentes que tuvieron lugar cuando los jugadores de Boca se retiraban del campo de juego.