Qué fue de la vida de Sergio Pezzotta: de la prueba frustrada por ser fútbolista a ser árbitro

El arbitraje es una carrera en la que son más las críticas que arrecian que los reconocimientos. Sin embargo, hay quienes forjan su vida alrededor de ella. Buen ejemplo de ello es Sergio Pezzotta. Luego de años de intentar ser jugador de fútbol infructuosamente, no renunció a su pasión por la pelota.

Como todo amante de la redonda quiso probar suerte como jugador, pero “la verdad que era malo. Jugaba de defensor o de arquero, pero me fui a probar de arquero, pero no quedé”. Luego de ello, debió salir a trabajar para sustentarse, aunque la pasión por la pelota era más fuerte. “Hice de todo en mi vida. Fui ayudante de portería, repartidor de fiambres y lácteos... El arbitraje me cambió la vida”, le confesó a la Capital, de su Rosario natal.

Su inicio en el arbitraje se dio de manera fortuita, mirando la final del mundo que se disputaba en Italia. “El partido era la final de la Copa del Mundo de 1990 ante Alemania, donde Argentina terminó perdiendo con un penal sobre la hora. ¿Qué se le cruzará por la cabeza a ese tipo que dirigía? Ese famoso penal de Codesal en los últimos instantes del partido despertó mi curiosidad. Con el tiempo se fue transformando en una pasión”, comenzó

Y completó: “Empecé por curioso, pero al poco tiempo sentí pasión por estar dentro de un campo de juego”.. Debutó en la Primera División de Argentina el 5 de abril de 1999 en un partido entre Talleres de Córdoba y Estudiantes de La Plata, con victoria local por 2 a 0. El oriundo de Rosario ha dirigido 260 partidos del fútbol argentino con 109 victorias locales, 77 empates y 75 victorias para los visitantes, Fue réferi internacional desde el año 2000.

Paralelamente a sus últimos años en el arbitraje, comenzó su trabajo sindical. En 2010 fue elegido como secretario general del Sindicato de Árbitros Deportivos de la República Argentina (SADRA) en la provincia de Santa Fe. En 2011 fue el árbitro en el encuentro que River descendió, ante Belgrano, y lo marcó para siempre.

Se retiró a fines del año 2012. "Me quedó en el haber no haber dirigido un mundial, porque cuando tuve la oportunidad de hacerlo, en la preparación de 2009 con vistas a Sudáfrica, sufrí dos desgarros en el momento más inoportuno y me quedé sin nada. Pero igual estoy contento con mi trayectoria", reconoció años después.

En 2023 participó de a Unión de Árbitros Deportivos de Argentina (UADA) que lo tiene en la cima de sus autoridades confirmadas para el período hasta 2027. El sindicato fue reconocido por el Ministerio de Trabajo de manera oficial en agosto de ese mismo año. 

Pezzotta rompió el silencio sobre el descenso de River ante Belgrano

El ya retirado colegiado rememoró el fatídico 26 de junio de 2011, porque la herida del descenso de River ante Belgrano sigue abierta en la memoria de los hinchas millonarios. Pezzotta compartió sus sensaciones y su perspectiva sobre un partido que aún hoy es recordado.

“Tengo la conciencia tranquila. Me equivoqué como se equivocan todos”,detalló al respecto y echó por tierra cualquier suspicacia sobre su desempeño en la revancha de la promoción de aquel año ante Belgrano en el Monumental. “Me quieren encontrar un muerto en el placard y no me lo van a encontrar. ¿Sabés por qué? Porque nunca lo tuve”, argumentó.

A su vez, Pezzotta lamentó haberse equivocado en la jugada de la polémica, pero ponderó que siempre dio la cara, cuando otros no tomaron el mismo camino: “El único que estaba en ese momento para ir a poner el pecho era yo, no había otro. Porque a uno le dolía el pelo, al otro le dolía la muela...”.

El exárbitro dio a conocer que nunca más vio el encuentro y que, ante los rumores de sobornos (“una valija que no llegó, una mexicaneada”), se cuestiona cómo pudo seguir dirigiendo hasta 2017 si algo de eso fuera cierto. “Hay periodistas que son hinchas, entonces tiran cualquier bolazo para levantar el rating”, dijo.

Asimismo, Pezzotta ratificó la irrupción de barras en el vestuario arbitral y la ardua determinación de seguir con el encuentro ante la ausencia de resguardo policial adecuado. “Optamos por seguirlo. Creo que actuamos fríamente y los encargados del operativo de seguridad nos dieron las garantías necesarias.