(De la Redacción de DOBLE AMARILLA) Fue el tema del día, y posiblemente de la semana. ¿Hubo presiones para que Gimnasia – Boca no se juegue? Lo que alimentó en gran parte las sospechas del público fue el cambio de opinión del árbitro Facundo Tello. El colegiado pasó de ser optimista para la realización del partido a suspender. Todo eso, en media hora. A su favor está que el agua que estaba cayendo sobre el estadio de 60 y 118 era incesante. 

Por la tarde, en declaraciones a Radio La Red, Tello dijo: “puedo entender que resulte desprolijo, la realidad es que para todos era más cómodo que la decisión fuera clara y que la cancha fuese una pileta cuando llegamos. Llamativamente estaba bien; desde el primer momento, pensamos en una cancha más mojada pero el estado del campo de juego nos obligaba a esperar un poco más. Salimos tres veces en una hora y media y veíamos cómo se acumulaba agua”.

El árbitro afirmó que se paró en la consideración “que el agua iba a ser más protagonista” para suspender el partido. Y no dejó de mencionar dos puntos clave: el peligro de lesiones de jugadores y el hecho que, de comenzarlo, cabía la chance que tenga que suspenderlo a los pocos minutos. 

“Puntualmente el motivo reglamentario de la suspensión son las condiciones del campo de juego y el clima: pasó media hora entre que salí y volví a salir, se había acumulado mucha agua y pensamos que estábamos reglamentariamente para suspenderlo”, dijo Tello. 

Según pudo saber DOBLE AMARILLA, desde temprano la intención de Boca era no jugarlo. Fuentes dirigenciales de Gimnasia le confirmaron a este medio que ni bien arribaron al Bosque, representantes de la delegación boquense avidenciaron intenciones de suspender el partido, “a pesar de que la cancha estaba buena”. 

Desde la Superliga se comunicaron con el referee mediante Horacio Elizondo, de acuerdo a lo que indican los protocolos y reglamentos. Y eso dijo el propio Tello en declaraciones radiales: “El que se comunicó conmigo fue Horacio Elizondo. Me dijo que respetaba lo que yo entendiese que era mejor. Yo lo llamé por carácter informativo, la decisión la tomaba yo. Lo que más disfruto del trabajo que tengo es la libertad que tengo y con la que lo hago, nadie me condicionó”.