En el Gigante de Arroyito, Marco Ruben vivió una noche inolvidable: convirtió un tanto en la victoria frente a Estudiantes y se despidió del fútbol profesional ante el público canalla que lo ovacionó de principio a fin.

El ídolo de Rosario Central decidió colgar los botines tras el encuentro frente al 'Pincha', donde su equipo se impuso por 3-1 e hizo uno de los tantos de la victoria. “Es un sueño cumplido. Me retiro de la mejor manera. Haciendo un gol, un gran partido. No puedo pedir mas. Estoy feliz por haber cumplido muchos sueños con la camiseta de mi vida”, confesó el delantero. 

El atacante, de 35 años, debutó el 25 de agosto de 2004 y, contando este último partido, disputó 262 encuentros en el 'Canalla'. Además, con el tanto de está noche, alcanzó los 105 goles con la camiseta de 'La Academia'. 

"Le dedico esto a mi padre que ya no está, a mis hijos que me vieron de chiquitos jugar con esta camiseta y tienen la enfermedad adentro, esa cosa linda de ser hincha de Central. A mis compañeros, a los empleados del club. Con los hinchas de Central somos uno para el otro. Estoy acostumbrado a ese cariño, no me entra en el cuerpo tanto amor que me entregan. Hoy me dieron la despedida soñada", reconoció ante la pregunta del periodista dentro del campo. 

A pesar de que el entrenador quería sacarlo de la cancha, el ídolo no quiso irse del terreno de juego, completó los 90 minutos y fue ovacionado por todo el estadio. “Los últimos días fueron muy intensos, muy movidos. Termina mi carrera en el club donde siempre desee jugar y viví muchas cosas, muchos sentimientos de todo tipo”, afirmó.