El entrenador de Argentinos Juniors, Gabriel Milito, realizó una "catarsis", como él mismo confesó, tras la eliminación en semifinales de Copa Argentina, al sostener que "todo el mundo quería que Boca llegara a la final, pero encima ellos se quejaban antes de jugar, y entonces, si ese club justamente hace eso, que queda para los demás".

"No me gustó que Boca se quejara, justamente Boca, de que nosotros no teníamos un día de descanso más que ellos. Porque si ellos se quejan, que nos queda a lo demás. No me gusta llorar, pero me molesta que los equipos poderosos salgan a hablar y quejarse, porque siempre condicionan a los árbitros", le dijo Milito a TyC Sports.

"Porque Boca es un imperio contra el que nosotros debíamos jugar y como esto es un gran negocio, todos querían, incluyendo la prensa, que pasaran ellos y no nosotros", apreció.

"Por eso hay que recordar lo que pasó años atrás en Boca-Central con el arbitraje de (Diego) Ceballos" evocó Milito, en referencia al grosero error que cometió el juez en aquella final del 2015, cuando sancionó como penal una infracción que se cometió fuera del área y que le permitió –en aquel entonces- enderezar el triunfo en favor del conjunto que dirigía Rodolfo Arruabarrena.

Respecto de la polémica jugada en que le anularon el gol del empate a Argentinos Juniors, resaltó que el autor del tanto, Nicolás Reniero, le dijo que "tocó la pelota y después quedó habilitado cuando convirtió, pero el árbitro (Fernando Echenique) cobró otra cosa".

"Y cuando digo que me molestó lo que se habló antes lo digo por (Juan Román) Riquelme, con todo el respeto y la admiración que le tengo, ya que lo conozco desde muy chico. Porque Román dijo que el presidente nuestro (Cristian Malaspina) se movió muy bien en AFA, y la verdad es que Boca y River son los que tienen una fuerza que los demás no tienen", cuestionó.

"Lo que pasa es que acá hay mucho para mejorar, para hacer mejor al fútbol argentino, y cuando más sangre hay, más vende. Y lo digo desde el exitismo que hay en el fútbol local hasta del propio seleccionado argentino", expresó.

Sobre su equipo sostuvo que "jugar una semifinal de Copa Argentina en este primer año no está mal, si se lo toma de manera objetiva. Por eso les dije a los jugadores que estaba muy contento con todo lo que habían entregado en este tiempo y por lo de hoy. Porque como dijo Alejandro Sabella, lo importante es ser dignos en la derrota".

"Cuando dirigía a Estudiantes de La Plata había un periodista que me llamaba todos los días para que le adelantara el equipo, y como no lo hacía me pegaba por todos lados. Entonces un día lo llamé y le dije que si lo hacía con él y no con los demás, eso hablaba muy mal de mi", disparó.

"Y antes había otro periodista que era projugadores en un programa de la medianoche, pero tiempo después cambió de canal y por no sé que razones, nos mataba todos los días. Eso es el negocio que me duele y no me gusta", cerró Milito con sus diatribas también en torno a la prensa.