Defensa y Justicia y Talleres de Córdoba igualaron 1-1 en Florencio Varela en un partido correspondiente a la 7ma. fecha de la Liga Profesional que tuvo como nota central el penal en favor de los locales cobrado por el árbitro Fernando Rapallini, en el contexto de una falta que nunca existió como luego se pudo constatar con el VAR.

En un partido con muchas acciones frente a los arcos generadas por los dos equipos, el árbitro cobró un protagonismo no recomendable al considerar que hubo penal sobre Nicolás “Uvita” Fernández, en una jugada en el minuto 47 del primer tiempo, a pesar de que luego el VAR mostró que no existió foul.

El goleador de los locales ejecutó el penal y empató el partido, cuyo marcador había abierto, de tiro libre el talentoso volante albiazul, Rodrigo Garro.

Al principio del encuentro, Defensa y Justicia se fue encima de los cordobeses, con David Barbona volcado a la derecha casi como un extremo, con Santiago Solari y “Uvita” Fernández en el tándem ofensivo.

Para salir del asedio, los cordobeses eligieron usufructuar la velocidad del colombiano Diego Valoyes, quien a los 3 minutos abrió un surco en su camino hacia el arco local, pero fue derribado.

De esa falta, Garro la ubicó en el primer palo de Unsain, a quien no lo ayudaron sus compañeros de la barrera que se abrieron, así como la pelota que le pico adelante, y fue a posarse en el fondo de la red.

Los locales buscaron reponerse, pero el equipo dirigido por Javier Gandolfi no dio tregua y a los 8 minutos Benavídez fusiló a Unsain que respondió despojando hacia un costado. El encuentro siguió disputándose en campo 'verdeamarillo', cuyo equipo retrocedía de manera desordenada, mientras que a Kevin Gutiérrez y al paraguayo Rodrigo Bogarín les costaba apoderarse del centro del campo.

Hasta los 30 y pico de minutos, Talleres manejo los tiempos, pero los dirigidos por Julio Vaccari recuperaron el dominio.

Defensa cargó contra el sector izquierdo de Talleres, donde Gandolfi improvisó a Julio Buffarini como lateral izquierdo, a quien tanto Barbona como el uruguayo Agustín Sant’Anna enloquecieron hasta que en el minuto 48 “Uvita” Fernández aportó un “piscinazo tremendo” que Rapallini compró, a pesar de haberlo chequeado en el VAR, a cargo de Diego Abal.

El centrodelantero cambió por gol el cobro de una infracción que no fue y el empate quedó instalado.

Cuando Rapallini dispuso el final del primer tiempo, desde el banco de suplentes de los visitantes se le fueron encima para protestar por una falta que no existió.

Al retomarse el segundo tiempo, Vaccari adelantó la línea de cuatro del fondo, crecieron Gutiérrez y Bogarin y eso insuflo de ánimos a Barbona y a “Uvita” quienes empezaron a poner en problemas a los cordobeses.

El equipo local siguió yendo, mientras que Talleres se agazapó para jugar de contra y las acciones comenzaron a sucederse como el disparo del colombiano Edwin Mosquera que el arquero Guido Herrera tapó de manera formidable.

Los locales siguieron insistiendo pero chocaron contra el mediocampo y la defensa de Talleres, que siempre inquietaba con sus réplicas.