Botafogo, en crisis: enojo del dueño del club por las quejas públicas de los jugadores
Alexander Barboza y Jefferson Savarino expresaron su descontento con la política deportiva que tomó el club desde la obtención de la última Libertadores. El magnate estadounidense John Textor, propietario del cuadro de Río de Janeiro, no recibió de buena forma estos comentarios. Detalles.
Botafogo vivió una noche complicada en el estadio Presidente Perón, donde cayó por 2-0 ante Racing en el primer encuentro de la final de la Recopa Sudamericana. Este revés se suma al mal momento que atraviesa en el Campeonato Carioca, pese a que hace apenas dos meses y medio celebraba la conquista de la Copa Libertadores y el Brasileirao.
Sin embargo, la salida del entrenador Artur Jorge y la partida de jugadores fundamentales como Thiago Almada, Tiquinho y Luiz Henrique dejaron al equipo sin una dirección clara. La situación se tornó aún más difícil tras ciertas declaraciones de los jugadores luego de la derrota ante la "Academia".
Las críticas provinieron del defensor argentino Alexander Barboza y del atacante venezolano Jefferson Savarino, quienes expresaron su malestar por la falta de un entrenador fijo durante los últimos 49 días. Además, manifestaron su descontento porque el técnico interino, Cláudio Caçapa, solo pudo llevar a cabo tres sesiones de entrenamiento antes de enfrentar al conjunto dirigido por Costas.
"Caçapa es entrenador interino, no sabemos si se quedará todo el año. Los jugadores también han cambiado. Quedan 16 futbolistas , poco a poco van llegando refuerzos. Muchos todavía no pueden jugar, lleva tiempo. El tiempo apremia, esto estorba. No podemos pensar en una idea nueva, hacer lo que quiere el entrenador. El trabajo tiene una semana. Es difícil que las cosas salgan así", aseguró Barboza.
Por su lado, Savarino comentó: "Afecta, claro que sí, no tener un entrenador resuelto. Estamos intentando dar lo mejor en el campo y no podemos. Lo necesitamos, pero no hay nada que hacer, hay que esperar a que llegue el entrenador y ahora tenemos un }interino. Esperamos que las cosas mejoren en el próximo partido".
Estos comentarios no cayeron bien en John Textor, el empresario estadounidense propietario de la "Estrela Solitaria". Textor, que siguió el partido desde Miami, se comunicó con los directivos que estaban en el estadio tras la derrota, según informó el periódico Globoesporte.
El malestar con la conducción del equipo no es nuevo. Ya había comenzado durante el interinato de Carlos Leiria, quien provenía del equipo Sub-20 y estuvo al frente del primer equipo en siete encuentros del Carioca. Su desempeño también generó descontento, especialmente tras la derrota por 3-1 ante Flamengo en la Supercopa de Brasil el pasado 2 de febrero.
Los futbolistas habían manifestado su disconformidad con las alineaciones que planteaba Leiria y con el riesgo al que expuso a algunos jugadores. Un claro ejemplo de esto fue el partido contra Nova Iguaçu, en el que Bastos y Artur fueron titulares y terminaron lesionados, lo que aumentó aún más las críticas al manejo del equipo.