Luis Advincula, jugador de Boca, quien debutó el miércoles pasado en la eliminación a River por penales en los octavos de final de la Copa Argentina, mostró hoy su alegría por haber estado en el superclásico.

"Me tocó debutar en un superclásico que quedará en la historia y para mi es una gran alegría. Fue un debut soñado", dijo el lateral peruano en conferencia de prensa.

Tras incorporarse a Boca procedente del Rayo Vallecano de España, en plena pretemporada y con solo tres entrenamientos con el plantel xeneize, Advíncula dijo que "sé que puedo dar mucho más de los jugué el miércoles, pasé un mes y medio sin fútbol. Poco a poco iré mostrando mi mejor versión".

También explico sus características de juego: "Soy un lateral al que le gusta irse al ataque, me gusta pasar mucho. Por eso me gustó venir a Boca, porque es un grande que tiene que salir a buscar los partidos".

"Si bien me siento cómodo jugando de cuatro, de carrilero es una posición que no me disgusta. Pero con tal de jugar, lo hago en cualquier lado", agregó el futbolista, también jugador del seleccionado peruano de fútbol que dirige el argentino Ricardo Gareca.

En cuanto al ídolo Juan Román Riquelme, vicepresidente segundo del club de la Ribera, señaló que "Román fue el primero que se contactó conmigo para venir aquí y que mostró interés por mi juego. A uno le hace sentir bien, hace que uno deje todo y se venga donde realmente lo quieren".

Por último, habló de sus objetivos en Boca y a la amistad que tiene desde chicos con su compatriota Carlos Zambrano: "Mis objetivos son los dos títulos que vienen. Lamentablemente quedamos afuera de la Copa Libertadores. Ahora tenemos la Copa Argentina y el torneo local, y Boca las tiene que ganar".

"Con Zambrano nos conocemos desde los 16,17 años, toda una vida. Tenerlo en cancha me ayuda, nos conocemos solo con mirarnos y eso me ayudo mucho el miércoles", expresó.

Tras la CLASIFICACIÓN, BOCA JUNIORS volvió al trabajo: el FOCO XENEIZE, post SUPERCLÁSICO ante RIVER

Luego también habló con la prensa Agustín Rossi, quien el miércoles se convirtió en el único arquero de la historia de Boca en eliminar dos veces a River por penales en partidos oficiales.

"Haber logrado un récord así ante el máximo rival para mi es muy importante. Haber eliminado dos veces seguidas a River hace todo más grande", señaló el arquero.

Rossi no se olvidó de los incidentes ocurridos en Brasil después de la eliminación por penales ante Atlético Mineiro: "Lo de Brasil nos dolió a todos por la manera que quedamos afuera. El aislamiento, 15 horas en el micro, si jugás o no jugás, la incertidumbre que sufrimos, estar encerrados. Por suerte se hizo un buen grupo y salimos el miércoles adelante".

El plantel de Boca entrenó esta mañana en el predio de Ezeiza, luego de tener ayer el día libre y la idea del entrenador es hacer algunos cambios para enfrentar a Argentinos Juniors el próximo domingo, por la quinta fecha de la Liga Profesional, y preservar a algunos futbolistas que están cansados después de estar ante Talleres de Córdoba por el torneo local y contra River por la Copa Argentina.

El posible once podría ser con Agustín Rossi; Marcelo Weingandt, Carlos Izquierdoz, Marcos Rojo o Lisandro Lopez y Agustín Sández o Frank Fabra; Cristian Medina, Alan Varela, Juan Ramírez y Aaron Molinas o Edwin Cardona; Cristian Pavón y Norberto Briasco.

Boca volverá a trabajar mañana desde las 10 en Casa Amarilla y luego el plantel quedará concentrado en un hotel del barrio porteño de Monserrat.

Por último, el delantero colombiano Sebastián Villa, quien sigue sin presentarse a entrenar y que fue intimado por el departamento de legales del club para hacerlo, pidió una licencia especial para viajar a su país.