(De la Redacción de DOBLE AMARILLA) Marcelo Gallardo no pudo asistir a La Bombonera. Conmebol no lo dejó. Pero el plantel de River no estuvo sólo. Además de la dirección técnica del binomio Matías Biscay y Hernán Buján, 30 directivos y ex directivos acompañaron a River a la primera final de la Copa Libertadores de América.

"Doble Amarilla" pudo semblantear como vivieron los primeros '90 la directiva del "Millonario" en "territorio hóstil". Del lado de la recepción, fuentes del "Millo" le destacaron a este sitio que hubo "mucho respeto" de parte de la gente de Boca: "Nos trataron bárbaro", dijeron.

La sorpresa mayor de la tarde fue con la requisa que la Policía de la Ciudad realizó en el vestuario de River. Hubo sorpresas, preguntas y hasta alguna risa. Eso sí, nadie intervino. Nadie de la delegación encabezada por Rodolfo D'onofrio, Jorge Brito y Stefano Di Carlo, bajó al vestuario visitante a pedir explicaciones.

Una regla que hoy se rompió

De un tiempo a esta parte, D'onofrio bajó una regla de Oro para los integrantes de la Comisión Directiva de River: no se gritan los goles como visitante. Sin embargo, esa regla hoy no resistió. "Se gritaron los goles y bastante", le dijo alguien que estuvo en ese palco a este sitio. Eso sí, dentro del palco, ni un mínimo gesto hacia afuera, dónde estaban los hinchas de Boca. 

El lugar dónde los dirigentes de River vieron los cuatro goles de la Superfinal está ubicado en la segunda bandeja de "La Bombonera", al lado de la parte de prensa y es el mismo que siempre ocupa la delegación de River cuando va a La Boca, salvo cuando el club de la Ribera cede los palcos bajos. Por eso, hasta se respetaron los lugares de siempre. Sí, hubo cábalas. "Los que fuímos siempre, en el mismo lugar específico", fue una suerte de mantra. 

La tapada que sufrieron por radio

Por cuestiones de Seguridad, los dirigentes de River abandonar el palco en La Bombonera diez minutos antes que termine el partido. Entonces, la gran tapada de Franco Armani no la vieron "in situ", si no por radio. Sí, la CD en pleno del "Millo", los vocales titulares, los vocales de la minoría, los de la Comisión Fiscalizadora y los únicos "exs" que estuvieron presentes, Andrés Balotta y Matías Patanian, sufrieron por audio la jugada que pudo haber cambiado el optimismo con el que se volvieron al Monumental en alguna cara larga. 

Al terminar el partido, la sensación general, todavía con los nervios crispados era de "haber jugado para ganar" y de alivio y conformismo por el hecho de haber "empatado dos veces". Al salir de La Bombonera, en las tres combis que siguieron al micro de River hubo cánticos (el que se acuñó en la noche de Porto Alegre fue el hit) y euforia. River había salido de La Bombonera vivo y luego de remontar dos veces el partido. No se ganó nada, pero tampoco se perdió nada y eso dejó contentos a los dirigentes de River.

D'onofrio, la única voz

Al finalizar el partido, el presidente del club habló con "Radio La Red". Allí aseguró: "Fue un partido increíble. Si fue al Mundo, se demostró que el River-Boca es increíble. Me quedé muy pero muy conforme por la actitud de los chicos nuestros y por la manera en que jugamos”, aseguró, resumiendo el pensamiento generalizado en el "Mundo River".

"Por ahí me sale el hincha, pero creo que jugamos un poco mejor, faltó el último tiro al arco. Pero fue un gran partido y para la Revancha River está muy bien", aseveró D'onofrio, que también le dedicó un párrafo a Roberto Tobar: "Impecable Tobar. Tengo que agradecer, porque el otro día Domínguez dijo que los árbitros que iban a dirigir iban a ser del nivel que merece la Copa Libertadores y hasta ahora lo están demostrando"

Por último, el mandamás del club de Núñez, remarcó: "Creo que se nos puede dar el 24, pero hay que ir con modestia. River tiene el juego como para ganarlo pero ellos son un equipo durísimo".