(De la Redacción de DOBLE AMARILLA) Hace meses, con el desmembramiento de la barra de River como mascarón de proa, la Seguridad de la Nación primero y, ahora, de la Ciudad, trabaja en un "Plan maestro" con el objetivo final de erradicar las barrabravas de los estadios argentinos y entregarle la potestad de la "fiesta" de las tribunas a hinchas elegidos previamente por los clubes. 

Esta suerte de "blanqueo" de la hinchada es la enorme apuesta del Comité De Seguridad de la Ciudad de Buenos Aires. La misma contiene un arma de doble filo y llega ante la inacción de los clubes en colocar el "derecho de admisión" propio a sus hinchas más violentos. El estado recoge el guante, pone la cara, aplica la prohibición y así, afirma que ayuda a los clubes. Pero, atención, también los expone. Porque este programa incluye el armado de una base de datos en la que cada club informará quienes serán los hinchas que tengan el control de los bombos y las banderas. "Sabemos que en esas listas no irán todos nenes de pecho, no somos inocentes, pero los clubes responderán por ellos, no se podrán hacer más los distraídos"; le dice a 'Doble Amarilla' alguien que está en el armado del proyecto desde los inicios del mismo. 

La idea consta de varias etapas. Primero, que los clubes armen una suerte de padrón y designen a quienes llevarán adelante la 'fiesta' en las tribunas. Si llega a aparecer algún barra con antecedentes, inmediatamente entrará a regir el 'derecho de admisión' para esa persona y el club deberá explicar porque lo puso. ¿Y que pasa con aquellos barras que no tienen antecedentes legales?. "Nosotros, para actuar, necesitamos tener un sustento legal y judicial. Si hay barras que no lo dan, podrán estar en la tribuna. De todas maneras, con este programa, los tendremos mucho mejor vigilados y nadie podrá decir que no los conoce", indican, con entusiasmo, desde las altas esferas de Seguridad de la Ciudad.

Además, el nuevo programa apunta a erradicar la violencia: "Ya no hay margen para la violencia. Esto no es un registro de barras, es una regulación muy estricta de todo lo que sucede en el fútbol. Apuntamos a sacar todo lo que es delictivo y, para eso, hay que dejarlo expuesto. No queremos dejarle los bombos y las fiestas a los más violentos. Queremos romper ese paradigma que los más violentos llevan la fiesta", indican desde la cartera de seguridad porteña, en charla con 'Doble Amarilla'

También, desde Seguridad, indican que el camino que se recorrió en River desde noviembre de 2018, que fue el descabezamiento de 'Los Borrachos del Tablón', se seguirá ahora en Nueva Chicago. "Vamos a meter (en el derecho de admisión) a todos los violentos que podamos. Nosotros necesitamos un sustento judicial para dejar a alguien afuera de la cancha. Como los clubes no ponen derechos de admisión, lo tenemos que hacer nosotros", indican. Es más, esto que sucedió en Mataderos fue el puntapié necesario para apurar la implementación e incluir también la ascenso, pese que originalmente estaba pensado para ser un programa que se iba a "probar" en la Superliga.

Además, se realizará una suerte de "listado" de aquellas banderas que suelen vestir las tribunas. Esto se explica en que, por reglamento, no deberían existir ningún "trapo" que supere las medidas reglamentarias: 2x1. "Queremos regular las banderas que hay en los estadios, toda bandera mayor a 2x1, tiene que tener un nombre, porque no es lo permitido en la norma. Para meter una bandera más grande, tenés que tener un responsable", explican sobre los motivos por los cuales se hará esto.

Más allá de limitar las banderas, cercar a los barras y comprometer a los clubes en el programa, esta nueva idea también los expondrá a fondo: "La idea es dejar expuestos a los dirigentes. Sabemos que esto es un arma de doble filo. No me pongas a un delincuente ahí, porque vos vas a quedar pegado. Si vos empadronas un barra, yo te los voy a sacar del listado. Pero hay que dejarlo expuestos primero"

Desde Seguridad, por lo bajo, reconocen que puede existir un "factor político" detrás de este in crescendo de violencia barra en varias provincias y distritos, que aumentó exponencialmente en los últimos dos meses. De todas maneras, se encargan de insistir en que, desde la Rosada, la idea es ir por el mismo camino que el gobierno de Mauricio Macri en cuánto a la seguridad en el fútbol. Sin embargo, ven la interna que existe en la Seguridad Nacional y Provincial como "factor importante" en este resurgimiento de los violentos. Habrá que ver si con esta nueva idea, el Estado finalmente le puede poner el lazo a los violentos.