Quebrado. Una imagen poco habitual en él. Gianluiggi Buffón le dijo adiós a la Selección italiana de la peor manera: quedándose afuera del próximo Mundial de Rusia 2018. Un dolor colectivo, pero también individual, porque el arquero se quedó sin el récord que iba a conseguir: jugar seis mundiales consecutivos.

Ante los medios, Buffón se desarmó y lloró. Se le cayó la armadura y sólo esbozó: "Lo siento. Lo siento, pero no por mí. Lo siento por todos", aseguró. "He terminado. El tiempo es tirano", agregó y lamentó que "mi último partido con la Selección de Italia sea este, la no clasificación al Mundial".

En medio del dolor, el San Siro despidió a Gigi con una ovación. "Lo siento, pero no por mí, por el grupo. Porque hemos fallado un objetivo a nivel social que era importante. Esta es mi única decepción y no la de terminar. El tiempo pasa para todos. Y es correcto que sea así".

"Es duro terminar así. Han ganado, con poco, pero tienen mérito", manifestó sobre la Selección de Suecia y cerró al dejar su legado en manos de "Donnarumma (Gianluiggi, del Milan), Perin (Mattia, del Genoa) y todos los demás".