(De la Redacción de DOBLE AMARILLA) Independiente tuvo un pequeño respiro en su casa: venció por 1-0 a Fortaleza de Brasil con gol de Leandro Fernández y quedó parado de buena manera para la vuelta.

El clima fue hostil y tenso durante todo el encuentro. Más allá de algunos aplausos para Fabricio Bustos sobre el cierre, los silbidos, los cánticos contra la dirigencia y el enojo por el clásico perdido ante Racing se hicieron notar con fuerza. La victoria sirvió para calmar las aguas y bajar la ebullición de los hinchas rojos.

Con el 1-0 en la espalda, Independiente disputará la vuelta en Ceará el próximo jueves 27 de febrero, desde las 21:30. De lograr un empate o una victoria, pasará directamente a la Segunda Fase.