(De la Redacción de DOBLE AMARILLA) Boca llegó sin mayores inconvenientes al Monumental. Fueron 45 minutos de viaje desde Ezeiza a Núñez, por la Autopista Ricchieri, su continuación Dellepiane, Paseo del Bajo, Figueroa Alcorta y Libertador. 

El ingreso al Monumental, afortunadamente, no fue con problemas debido a la gran custodia policial y a la logística que se desplegó desde la salida desde el Hotel hacia el estadio. Además, la recordada esquina de Libertador y Quinteros estaba desierta. Esto se dio por una polémica decisión de la Policía de la Ciudad. En el momento en que Boca salía de Ezeiza, la seguridad decidió cortar el paso por Libertador: nadie podía cruzar desde la zona del Ferrocarril Mitre al Monumental, hasta que pase el micro de Boca. Fueron casi 60 minutos de espera para muchos hinchas de River, lo que hizo que se acumulara mucha gente. Incluso, propios efectivos policiales decían no entender la decisión. Desde ya que el hecho que no haya público en la esquina, fue un punto a favor. Ahora, las demoras en el ingreso de la gente, complican el panorama. 

En tanto, las puertas del estadio se decidieron abrir media hora antes: los hinchas Millonarios comenzaron a entrar al Monumental a partir de las 18.