(De la Redacción de DOBLE AMARILLA) En un país donde el trabajo no abunda, un empleado de seguridad fue despedido por un hecho insólito. Néstor Portillo trabajaba para la empresa PCP, brindadora de servicios de seguridad a Boca. Vieron por televisión que festejó con los jugadores de River. Al día siguiente le llegó el telegrama de despido.

El hecho ocurrió en el final del partido en la Bombonera. River terminó festejando en el anillo central tras pasar a la siguiente instancia. En esos festejos, las cámaras de televisión captan a Néstor acercándose a Suárez y Pratto para darles un abrazo. Debido a esto, el empleado recibió al otro día el telegrama de despido.

La empresa PCP pertenece al rubro de seguridad. Trabaja para muchos comercios y cadenas multinacionales. Sin embargo, en el fútbol argentino solamente le presta servicios a Boca. Dicha empresa pertenece a un israelí. No quisieron dar detalles de la situación, pero 'Doble Amarilla' pudo chequear que Néstor pertenecía a la misma.

Teniendo en cuenta los momentos difíciles del país, no parece nada grato despedir a un empleado por un gesto minúsculo que hizo para con los jugadores de River, con quién evidentemente se identifica. Sin embargo, en las redes sociales, ya una persona busca contactarlo para poder darle empleo.

Desde la empresa PCP emitieron un escueto comunicado en su cuenta de Facebook en el que afirman que "desde hace 13 años" acompañan a Boca. "Anoche un evento potencialmente riesgoso culminó sin ningún tipo de disturbios, 0 heridos, 0 incidentes, un trabajo realmente impecable", escribieron.

"Pero esto se vio afectado por la actitud de un vigilador, una persona que no supo hacer a un lado su pasión de hincha para poder cumplir con sus labores como corresponde. A raíz de esto la empresa tomará las acciones correspondientes al caso", culminaron el comunicado.

Echan al empleado de seguridad que festejó con los jugadores de River

Teniendo en cuenta que lo que hizo fue en la Bombonera, y que la empresa solamente trabaja en el fútbol argentino con Boca, ¿Habrá tenido algo que ver el Xeneize en esta decisión?