(De la redacción de DOBLE AMARILLA) Ricardo Bochini contó cómo vivió el infartante partido de Independiente ante Fortaleza y le dio un respaldo a los jugadores más allá del flojo rendimiento. También elogió a Alan Franco y lo condecoró como el "jefe espiritual" del equipo.

La máxima gloria del Rojo diálogo en Radio Del Plata y analizó el flojo pero determinante partido del equipo de Avellaneda: "Ayer ocurrió algo extraordinario, era un partido en el que ya estábamos prácticamente afuera de la Copa Sudamericana. Fortaleza había jugado un poco mejor y a nosotros nos estaba costando. Por suerte, en el suplementario pudimos convertir".

Por otra parte, se refirió al hervidero que suele ser el Libertadores de América, donde Moyano y los jugadores reciben fuertes críticas: "La gente es un poco cruel con los jugadores, pero pienso que tiene que ver con que quieren lo mejor para el equipo. Más aún pensando en los millones de dólares que Independiente invirtió en jugadores".

En cuánto a las distinciones individuales, el 'Bocha' reivindicó a Alan Franco, quién estuvo cerca de irse en este mercado de pases: "Alan Franco era un jugador que Independiente lo estaba por vender y no se sabía si jugaba o no en Fortaleza. Antes del partido hablé con Pusineri y le dije que tenía que jugar si o si porque sino le iba a ir muy mal al equipo".

Por último, habló de lo que significa este envión anímico para el equipo y el público: "Si Independiente no pasaba de ronda, no tenía nada importante por jugar. La gente no iba a ir al próximo partido, en cambio ahora creo que va a estar más entusiasmada".