(De la Redacción de DOBLE AMARILLA) Una vez más, el fútbol del Interior quedó en offside. Ocurrió otro triste episodio, esta vez en la final de la Liga de Posadas, entre Club Mitre de Posadas y Sporting de Santo Pipó, debió ser suspendida tras una salvaje agresión al árbitro del partido, Gabriel Cortínez.

Todo empezó a a los 48' del segundo tiempo, con Mitre ganando 3-1 y con cinco minutos más por jugar de adición. Cortínez le sacó la segunda amarilla y la roja a Matías Benítez del elenco perdedor, bicampeón del torneo. Eso ocasionó la reacción desmedida de su compañero de equipo, Luis Angel Maciel, que lo noqueó de dos puñetazos. 

El árbitro quedó tendido en el suelo, sin poder reaccionar con un hilo de sangre cayendo por la comisura de los labios. La ambulancia tardó casi una hora en llegar a la cancha para poder asistir al Juez del partido. Al mismo tiempo, personal de la comisaría 17a de Posadas, aprhendió y demoró por unas horas al jugador agresor.

"Miro el cronómetro y faltaba un minuto y medio. Ahí recibo ese golpe que me deja dormido. Tengo mucha tristeza", manifestó Cortínez, ya recuperado horas después en declaraciones al medio local "Doble Cinco". El encuentro debió ser suspendido y ahora la definición quedó en manos del Tribunal de Penas de la Liga, ya que este partido era la final de ida.