La extensa etapa clasificatoria de 37 fechas para la Primera Nacional viene llegando a su fin. Cuando sólo restan 6 jornadas, empiezan los momentos de balances y definiciones para conocer al equipo campeón que obtendrá el primer ascenso y a los otros 12 que buscarán la segunda plaza a la máxima categoría. 

Sin dudas ha sido un torneo que, a lo largo de su duración, ha traído vaivenes futbolísticos en casi todas las instituciones. Pero dentro de ésto hay una "regularidad" que se hace notar dentro de la tabla de posiciones: la mayoría de los conjuntos que clasificarían a las instancias finales son provenientes del interior. 

La Primera Nacional y una definición con aroma "federal"

Con Belgrano como principal estandarte ubicado hace varias jornadas en la primera posición logrando, por ahora, el ascenso de forma directa, el recuento de los equipos "indirectamente" afiliados, se completa con San Martín de Tucumán, Instituto (1, 2 y 3 de la tabla respectivamente), Gimnasia de Mendoza, Estudiantes de Rio Cuarto, Chaco For Ever, Independiente Rivadavia de Mendoza, San Martín de San Juan y Deportivo Madryn. 9 sobre 13 u 8 sobre 12, como usted prefiera. Casi el 70%. 

Esta tendencia se viene manifestando desde hace 8-9 jornadas donde hasta en algunos tramos, con la inclusión esporádica de Deportivo Maipú dentro de ese esquema, el número fue mayor. Del lado "metropolitano" encontramos a All Boys, Estudiantes de Buenos Aires, Defensores de Belgrano y Almagro como quienes estarían hoy dentro de los clasificados a los playoffs y a pocas unidades esperando ganarse su lugar, Deportivo Riestra, Brown de Adrogué y Ferro.

Pero... ¿a qué se debe? En principio, debemos nombrar tres factores: económico, estructural y adaptación. El económico es el más evidente: varias de las instituciones del interior tienen o cuentan con un apoyo gubernamental fuerte que sostiene con publicidades gran parte de la erogación que tienen que hacer los clubes, pero otros hacen "pata ancha" en la gran masa societaria, tan fundamental en éstos tiempos. Por eso, la tabla no deja mentir: Belgrano, San Martín de Tucumán e Instituto, que hoy son los tres primeros, cuentan con todos los ítems que les permitió armar un plantel a la altura de las expectativas de ascenso acompañados por una estructura firme de club y la "costumbre" de pelear los torneos y conocer la divisional. 

La Primera Nacional y una definición con aroma "federal"

Otros como Estudiantes de Rio Cuarto, los mendocinos Gimnasia e Independiente Rivadavia y San Martín de San Juan, hacen gala de su estructura ordenada en lo institucional y económico, además del afianzamiento que tienen dentro de la Primera Nacional para poder lograr los objetivos y quedan los casos de los dos recientemente ascendidos: Chaco For Ever y Deportivo Madryn. Aquí se encuadra el concepto de "adaptación". ¿Por qué? Porque llevan años de transitar por el Federal A, una competencia muy similar a la Primera Nacional en cuanto a viajes, formato y hasta, tipo de juego, lo que facilita muchísimo la rápida adaptación al salto de divisional. 

¿Otro ejemplo? Esta misma situación sucedió con temporadas atrás, pandemia de por medio, con el equipo riocuartense de Estudiantes. Del Federal A subió a Primera Nacional y al primer año, manteniendo prácticamente el mismo equipo, estuvo a dos definiciones por penales de ascender a Primera. La categoría estandarte del Consejo Federal parece funcionar mejor que su par metropolitana (la B) a la hora de "preparar" a sus clubes.

¿Será la diferencia de presupuesto? ¿Será que el cambio de distancias a recorrer afecta más a los equipos 'metropolitanos' por la falta de experiencia ante esta situación? El fútbol casi nunca es lógico ni se cuenta con explicaciones para todo, pero lo que si es cierto y concreto es que la definición de la segunda categoría del fútbol argentino, tiene, por ahora, aroma y gusto "federal".