(De la redacción de DOBLE AMARILLA) Finalmente desde el Gobierno de Ecuador y la propia Federación de Fútbol (FEF) garantizaron el partido y Flamengo se llevó para Río de Janeiro una victoria por 2-1 ante Barcelona en el estadio Monumental de Guayaquil, por la cuarta fecha del Grupo A de la Copa Libertadores.

El Fla había informado por la mañana en sus redes sociales que dos trabajadores de club, involucrados en el plantel profesional, habían dado positivos por COVID. A su vez, habían aclarado que ambos profesionales estaban "aislados en Guayaquil”.

Ante esta situación, Flamengo determinó que cuatros futbolistas de la categoría Sub 20 viajaran desde Brasil para integrarse al plantel principal en Guayaquil: João Lucas, Natan, Guilherme Bala y Rodrigo Muniz, que llegaron apenas unas horas antes del partido.

La primera decisión, de acuerdo a lo anunciado por director de Salud del Municipio de Guayaquil, fue inhabilitar el Monumental de Guayaquil por los casos positivos y el riesgo sanitario de efectuar el partido. Sin embargo, tiempo después, la postura cambió por más intervención política de distintos sectores.

Según pudo averiguar Doble Amarilla, el Gobierno Nacional, con la principal voz de mando de la ministra de Gobierno María Paula Romo; el ministro de salud ecuatoriano, Juan Carlos Zevallos, y el titular de la Federación Ecuatoriana de Fútbol, Francisco Egas, garantizaron que el partido.