La Selección Argentina llega al debut de la Copa América con dos resultados aceptables pero no satisfactorios. Dejó cuatro puntos en el camino y dos de ellos fueron dolorosos tras el agónico empate de Colombia en Barranquilla. ¿La duda a estas horas? El armado defensivo, que tiene rendimientos que no conforman y dudas sobre si Cristian Romero podrá estar de cara al inicio frente a Chile.

La duda de Lionel Scaloni pasa por la primera línea de combate, que cuenta con mayores fragilidades respecto a los otros frentes. Si bien el ataque no termina de ser explosivo, tiene pasajes de buen fútbol y con una cierta dinámica que da lugar a la generación de peligro. Principalmente esa virtud se da cuando Lionel Messi encuentra a los socios en la cancha. Eso se potenció con el ingreso de Giovani Lo Celso en lugar de Lucas Ocampos.

Las incógnitas están atrás. En el partido ante Chile, Scaloni armó la defensa con Juan Foyth, Cristian Romero, Lucas Martínez Quarta y Nicolás Tagliafico. En el segundo partido realizó tres modificaciones: ingresaron Gonzalo Montiel (no jugó el  primer partido por tener covid), Nicolás Otamendi y Marcos Acuña. El único nombre que se repite en ambos armados es el del actual zaguero de Atalanta, autor del primer gol ante el team cafetero. Quien también sumó minutos y tuvo buenas respuestas fue Germán Pezzella, otra opción tentativa para el debut.

Tanto Martínez Quarta como Otamendi no lograron ser buenos acompañantes para Romero. En parte porque no están jugando en su posición natural de primer marcador central. A juzgar por el rendimiento de ambos, se podría decir que el ex River mostró mayores niveles de seguridad que el ex Manchester City. En parte también es porque la defensa estuvo más puesta a prueba frente a Colombia tras los dos goles tempraneros que cambiaron la dinámica del juego.

El problema es que, cuando Scaloni mira al banco, no encuentra la solución del problema. Una opción ya descartada es Foyth, que no formará parte de la lista para la Copa América y terminará yendo a Tokio por los Juegos Olímpicos. Otamendi es claro que no convenció al cuerpo técnico. Fue el autor del penal que le dio vida a Colombia y perdió duelos clave que terminaron siendo relevados por Romero. La otra opción es la de Lisandro Martínez, que participó con Chile pero sólo pudo mostrarse sobre su mayor virtud: los pases y la salida limpia. No estuvo a prueba en cuanto a los duelos y el juego aéreo, lo que más lo limita para poder ocupar ese lugar.

Volviendo al actual Atalanta, por suerte solamente sufre de una sobrecarga muscular de cara posterior del muslo izquierdo. No estaría para el partido ante Chile, pero ya lo consideran como una fija para integrar esa zaga central a lo largo de la Copa. A juzgar por los rendimientos, la pulseada para el debut podría estar entre Martínez Quarta, Pezzella y Martínez, en ese orden. Tiempos de definición a contrarreloj para Scaloni, que tendrá que confirmarlos para el lunes.