La Comisión Disciplinaria de la División Mayor del Fútbol Colombiano (DIMAYOR) decidió archivar la investigación en donde se analizaba un presunto arreglo de partido en la polémica victoria de Unión Magdalena sobre Llaneros, que terminó ascendiendo a la máxima categoría.

Llaneros jugó a comienzos de diciembre contra Unión Magdalena como local en la ciudad de Villavicencio y estuvo arriba en el marcador 1-0 hasta el minuto 95, cuando los visitantes marcaron dos veces consecutivas.

El video del partido mostró a jugadores de Llaneros que parecían no esforzarse ante sus rivales, permitiéndoles anotar el gol de la victoria con la que Unión Magdalena ascendió a la máxima categoría, superando a Fortaleza que perdió 2-1 como local frente a Bogotá.

Después de casi un mes de investigaciones, la Comisión estableció en una resolución divulgada el viernes que Unión Magdalena no tuvo ninguna responsabilidad en lo sucedido en la cancha, cuando anotó dos goles en el tiempo de reposición para asegurar el ascenso, ante la pasividad de los jugadores locales.

"Los jugadores del Magdalena, en el encuentro deportivo objeto de investigación, antepusieron los valores de lealtad, respeto mutuo y dignidad, mostrando respeto al adversario dentro del terreno de juego y propendieron por el mantenimiento del espíritu deportivo y el juego limpio, no encontrándose en ningún momento objetada su actuación por parte de los expertos del equipo de integridad de la FIFA", dijo la resolución.

"En atención a lo expuesto, ni los jugadores, ni el cuerpo técnico, cuerpo médico, el delegado o el representante legal del Magdalena, pueden ser vinculados a una investigación formal, puesto que el material probatorio recaudado hasta el momento no permite colegir que estos sujetos hayan sido partícipes de las conductas reprochadas, y como consecuencia, sus acciones durante el partido investigado no constituyen una infracción", agregó.

El sospechoso gol que le dio la clasificación a la primera división al Unión Magdalena desató indignación en Colombia entre aficionados, prensa, futbolistas, el Gobierno y las entidades rectoras del balompié.

Hasta el presidente de Colombia, Iván Duque, calificó lo sucedido como "una vergüenza nacional" y dijo que el deporte requiere transparencia, honestidad y cero tolerancia frente a cualquier situación que deslegitime la ética deportiva, mientras que la Fiscalía General abrió una investigación paralela e independiente a la de la DIMAYOR.