Sus comienzos fueron muy difíciles. El fútbol no le permitía ganar lo suficiente para llegar a fin de mes, pasó hombre y tuvo que buscar otros trabajos para poder sobrevivir. Sin embargo, gracias a que no bajó los brazos, toda esa etapa triste quedó atrás y hoy tiene un presente goleador en Chile.

Se trata de Lionel Altamirano, sobrino de Ricardo, que fue campeón de América con River y la Selección Argentina. El delantero de 32 años juega en Huachipato y es uno de los máximos goleadores del fútbol chileno.

En lo que va de la temporada, Altamirano marcó 6 goles en 14 partidos jugados. Un presente soñado después de un largo padecimiento vivido diez años atrás. En el medio, supo construir una larga carrera.

Altamirano rompe redes en Huachipato.
Altamirano rompe redes en Huachipato.

En Argentina, Altamirano vistió las camisetas de Deportivo Merlo, Unión, Altos Hornos Zapla, Colegiales y Estudiantes de Buenos Aires. En 2019 emigró a Chile, donde encontró su lugar en el mundo. Pasó por Santiago Wanderers, Puerto Montt, Universidad de Concepción, Rangers, Deportes La Serena y Huachipato, donde atraviesa un gran momento.

Los problemas económicos que tuvo Lionel Altamirano

"No tenía nada y ahí apareció el club de Jujuy. Arreglé sueldo, casa y comida, pero para mí solo. Para mi señora no había. Entonces, con mi sueldo le comparaba comida a ella, pero después dejé de cobrar y no teníamos para comer, entonces comíamos los dos del mismo plato. Nos cagábamos de hambre”, fueron las duras palabras de Altamirano a TNT Sports Chile, al recordar su difícil pasado.

Altamirano ganaba poco en el ascenso argentino y pasó hambre.
Altamirano ganaba poco en el ascenso argentino y pasó hambre.

Además, tuvo que trabajar llevando pasajeros durante buena parte del día.  "En su momento no daba para llegar a fin de mes, así que trabajé de Uber en Buenos Aires. A veces me tocaba hacer viajes larguísimos y después me tenía que volver sin viajes, por lo tanto, lo que ganaba lo perdía en la nafta”, contó.

Pese a las dificultades, Altamirano no se rindió y tuvo su premio. “Nunca pensé en abandonar, porque yo sabía que en algún momento la vida me iba a dar cosas buenas y por suerte hoy están llegando”, afirmó.