(De la Redacción de DOBLE AMARILLA) Gabigol fue protagonista de la final de la Copa Libertadores desde que Flamengo pisó el césped del Monumental de Lima. Primero, por tocar la Copa Libertadores antes del inicio del encuentro, algo inaceptable para algunos cabuleros.

Dentro del campo de juego y en apenas cinco minutos, el delantero mostró su jerarquía con los dos goles que sirvieron para revertir el partido y coronarse con el título de 'Campeón de América', levantando la Copa Libertadores luego de 38 años.

Una curiosa situación se dio al final del partido. El delantero se cruzó con Wilson Witzel, el gobernador de Río de Janeiro, que está identificado con las ideas de Jair Bolsonaro, presidente de Brasil, aunque en este año se fue alejando. En tanto, este año fue responsable de una dura represión en la favela. Además, había defendido que los policías tuvieran permiso para matar: "La policía hará lo correcto, apuntará a la cabeza y va a disparar", dijo.

Por otro lado, en junio manifestó que su gobierno podría arrojar misiles contra la favela Ciudad de Dios para asesinar a los narcotraficantes. No obstante y más allá de las personas que venden y trafican droga, en el lugar habitan 36 mil personas.

¿Qué hizo Witzel? Se arrodilló ante Gabigol. Y, ¿cuál fue la reacción del delantero? Le apretó la mano fugazmente y siguió caminando. 

Cabe destacar que el gobernador, en septiembre del año pasado, durante la campaña, Witzel habló con Lance! y afirmó ser fanático de Corinthians. Sin embargo, tras ganar los comicios, aseguró, en varias oportunidades, apoyar a Flamengo. En tanto, este sábado, publicó un video festejando el segundo tanto de Gabigol.