La Asamblea General de la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) ratificó esta semana la suspensión definitiva de su presidente Rogerio Caboclo, acusado de acoso sexual y moral por trabajadores de la entidad. La decisión fue tomada por unanimidad y confirma las sanciones previas que le impuso la Comisión de Ética del Fútbol Brasileño a Cabloco y por las que ya fue apartado de su cargo de forma provisional, según indicó la CBF en un comunicado.

Según los estatutos de la entidad, el presidente en ejercicio seguirá siendo, de manera interina, Ednaldo Rodrigues Gomes, antiguo dirigente de la Federación de Fútbol de Bahía. En paralelo, la CBF iniciará los trámites para convocar los comicios de los que saldrá su nuevo presidente.

A pesar de esto, Rodrigues, recurrió al Tribunal Superior de Justicia para mantenerse en el cargo hasta que se celebren nuevas elecciones en la entidad. El actual titular pide la suspensión de una decisión del presidente del TSJ, el cual había determinado al juez de primera instancia de la Justicia de Río de Janeiro, el nombramiento de Dino Gentile como nuevo mandamás de la CBF, según aseguró el sitio O'Globo. 

Asimismo, los abogados de Ednaldo Rodrigues aseguran que la Confederación ya firmó un Término de Ajuste de Conducta con el Ministerio Público de Río de Janeiro, el cual fue validado por la Justicia de Río de Janeiro. Este documento, que cuenta con la firma de cinco de los siete vicepresidentes de la CBF y por 22 de los 27 presidentes de federaciones estatales, afirma que Dino Gentile y el secretario general de la entidad, Eduardo Zebini, fueron partícipes de "un intento de injerencia interna de terceros" en la CBF. Asimismo, la CBF se comprometió a realizar una Asamblea General el lunes 7 de marzo, donde definirá el cronograma electoral y buscarán concretar la inclusión de los clubes de primera y segunda división para las próximas elecciones. 

Uno de los dos vicepresidentes que no firmaron la carta de apoyo al mandamás es Gustavo Feijó, mientras que Castellar Guimarães es el restante. 

En este contexto, la FIFA se contactó con la CBF y pidió información sobre la decisión del STJ. En este escrito, la entidad de Zúrich informó que, habitualmente, sanciona a las federaciones que sufren injerencias externas en sus administraciones.