Esta tarde, Claudio Tapia (AFA) y Sergio Marchi (Futbolistas Argentinos Agremiados) se reunirán otra vez para seguir conversando sobre algunos cambios que se podrían producir en el fútbol argentino  a partir del próximo torneo. Entre los temas más importantes, se tocará la quita de puntos para los clubes que le adeuden a sus futbolistas, y por otro lado, pondrán sobre la mesa la ampliación de los cupos extranjeros.

Según pudo averiguar Doble Amarilla, en el encuentro pasado el gremio comandado por Sergio Marchi acordó con la SuperLiga y con la AFA un mecanismo de control del día a día. Se sabe que uno de los pedidos del secretario general de Futbolistas Argentinos Agremiados es que si no están todos al día antes de empezar el torneo, no comience el fútbol. Y que el segundo punto a atender según el Sindicato es el siguiente: llevar adelante un control durante el torneo para evitar que se acumulen deudas en diciembre. Para cumplir con ese punto, es que el Tribunal de Fiscalización va a auditar las cuentas bancarias de los clubes. Si llegado el día previsto para el pago, el club no abona los sueldos a los futbolistas, tendrá diez días vista, otorgados por el Tribunal, para regularizar la situación. Pasado ese tiempo, si no se abonó el sueldo, se le quitará puntos al equipo en cuestión.

Por otro lado, sigue las conversaciones con el gremio para que el cambio de cupos sea el siguiente: que haya seis extranjeros por plantel, pero que sólo cinco puedan firmar planilla (jugar de titulares o ir al banco). Esa práctica se dejó de lado en los 90, cuando en Boca se permitían cuatro extranjeros pero solo tres podían firmar planilla. 

Según pudo saber Doble Amarilla, Sergio Marchi y su entorno accedería a que sean cinco los extranjeros que estén en el plantel de un equipo argentino, pero que es imposible que Agremiados de el OK a que el tope de jugadores nativos de otro país sea seis. “No hay chance”, le dijeron a este medio.