La muerte de Georgina Gálvez (25 años), de un paro cardíaco en la antesala de un partido entre la Selección de La Plata y de Las Flores, trajo consecuencias inmediatas. La Selección Argentina de fútbol femenino tomó cartas en el asunto y tomó la representación de todas las chicas que hacen el deporte y golpeó las puertas de la AFA.

No de manera literal, pero sí a través de una dura misiva, dirigida, justamente al presidente de la Comisión de Fútbol Femenino, Ricardo Pinela. En ella, básicamente, piden tres cosas: el pago de viáticos, una cancha de césped natural y dormir en un hotel cuando viajan. Cosas que parecen muy simples, pero que el fútbol femenino no tiene garantizadas. Aunque parezca mentira.

En un tramo de la carta, transcripta por el Diario Clarín, dice: "Nuestra disciplina arrastra problemas estructurales de larga data: no se puede practicar un deporte cuando no se cuenta con recursos básicos. En primer lugar destacamos que el viático correspondiente a las jugadoras que integran a lista presentada por el señor Carlos Borrello para conformar la preselección en vistas de la Copa América no ha sido entregado", denuncian. ¿Cuál es el monto? Hoy, es de apenas 150 pesos y ni así fue entregado.

En la misiva, destacan que al ser "amateur" la actividad, ese viático es el único ingreso que poseen para representar a la Argentina y remarcan que, para realizar su actividad, en muchos casos, deben faltar al trabajo o a la facultad para asistir a los entrenamientos.

También se quejan del cronograma y remarcan que "Ninguna epopeya deportiva puede llevarse a cabo cuando quienes le prestan el cuerpo deben viajar el mismo día de la competencia entre las 4 y las 9 de la mañana y dormir en un micro hasta la hora del encuentro, tal como sucedió el 30 de agosto en ocasión del partido amistoso jugado en la ciudad de Montevideo", relataron.

Y, también, exigieron una cancha de césped natural: "Exigimos que se adecúe el uso de las instalaciones para estar a la altura que el entrenamiento de una selección mayor requiere: necesitamos vestuarios acordes a la cantidad de jugadoras que formamos el plantel, así como una cancha de césped natural para el desarrollo de las prácticas".

Eso sí, la carta cierra apelando al "diálogo" y a poder hablar con los dirigentes. Cerraron solicitando "llevar el fútbol femenino al nivel que se merece".