La asamblea de 74 representantes del club Atlético Rosario Central aprobó en la noche del miércoles la memoria y balance del último ejercicio, por 35 votos contra 19 y 20 abstenciones, en la primera reunión por Zoom de un club de primera división del fútbol de la provincia de Santa Fe.

El encuentro fue presidido desde el salón Centenario del Estadio Gigante de Arroyito por el titular del club, Rodolfo Di Pollina, acompañado por el vicepresidente primero, Ricardo Carloni; el secretario Guillermo Hanono; el tesorero Adrián Raguzza y dos socios de la asamblea de representantes, uno por los dos tercios de la mayoría y otro por la minoría.

Los otros 72 representantes participaron por videoconferencia, con una lista de oradores con un tiempo establecido y derecho al pedido de la palabra en el tramo final.

Un abultado déficit operativo mensual y un pasivo del orden de los 19 millones de dólares fueron los datos duros del balance, que fue duramente cuestionado por varios del tercio de representantes de los socios enrolados en agrupaciones opositoras, entre quienes sobresalió la palabra del empresario villagalvense Diego Lavezzi, hermano y representante de Ezequiel "Pocho" Lavezzi, referente de la Agrupación "Origen Canalla"

Justamente, Lavezzi protagonizó sobre el final un cruce muy tenso con el vicepresidente Carloni, a quien le dijo que "lo invito a tomar un café cuando quiera para hablar de Central", luego de revelar una reunión que mantuvo con el presidente Di Pollina sobre su apoyo económico a la construcción de una sede de captación de jugadores juveniles, en un terreno cedido al club por el Ferrocarril Nuevo Central Argentino (NCA) en el Cruce Alberdi.

"Por supuesto que acepto la invitación de Lavezzi, pero primero debería llamarme por teléfono en vez de invitarme por Zoom. Y cuando dije lo del representante de Lavezzi fue para no exponerlo, pero aprovecho para decirle que espero que haga todo lo posible para que el 'Pocho' venga a jugar a Central a fin de año y nos dé todas las alegrías que esperamos", respondió Carloni.

Otro cruce picante fue protagonizado por el representante de Evolución Auriazul, Ezequiel Gómez, quien se preguntó "¿cuánto hace que no sacamos un 4? Los seis técnicos de los equipos de inferiores cobran 35.000 pesos y trabajan cuatro horas porque tienen que correr a otro trabajo, a diferencia de clubes modelo como Vélez y Lanús, donde trabajan cuatro horas con los chicos y cuatro con los videos".

Y en el final, el secretario Guillermo Hanono le respondió a Gómez: "ya que el socio citó a Vélez y Lanús como clubes modelo, que lo son, le pregunto: ¿Quién es el 4 de Vélez? Tomás Guidara, que viene de Belgrano, que se fue a la B Nacional. ¿Y quién es el 4 de Lanús? Leonel Di Plácido, que viene de Atlético Tucumán. No se puede sacar jugadores todos los años, todo el tiempo y en todos los puestos".