El hombre procesado por fraude al Estado que quiere volver al fútbol
Se trata de Gabriel Mariotto, ex vicegobernador bonaerense, que aspira a ser presidente de Banfield durante 2024. Procesado por la causa ‘Fútbol para Todos’, el mentor de la Ley de Medios quiere volver al ruedo de la pelotita. Va por su segundo intento, tras fracasar en 2021 al no alcanzar ni siquiera la minoría. Apartado de la política, distanciado de CFK, alejado del PJ, muy enfrentado al peronismo de su pago chico y con poco apoyo en su club, le queda la ficha de la rosca del fútbol para no quedar marginado totalmente.
Gabriel Mariotto cuenta en su CV con muchos apartados. Ya sin lugar en la política nacional (más aún de su fracaso en San Luis), se encuentra procesado y embargado por la Justicia, cuenta con contactos y relación fluida con grupos económicos relacionados al fútbol y a las SAD, distanciado de muchos dirigentes políticos y del fútbol (incluyendo a la conducción de la AFA). Con esa carta de presentación, quiere volver a meterse en el fútbol para recuperar algo del lugar que perdió en la política nacional.
Durante los años de oro del Kirchnerismo, Gabriel Mariotto fue un hombre importante. Nacido en Lomas de Zamora y de larga militancia en la universidad lomense, llegó a ser el impulsor de la Ley de Medios y el creador de Fútbol para Todos. Esos logros le valieron la bendición de Cristina Fernández de Kirchner, quien lo ungió como candidato a Vicegobernador de Daniel Scioli para los comicios de 2011. Ese fue su pico. De ahí en más la caída, abrupta, que aún sigue por estos días.
Mariotto pasó de ser un dirigente importante que estaba cercano a Cristina, a terminar rodeándose de Fernando Esteche (líder de Quebracho), Milagro Sala, Luis D’Elia o Amado Boudou. Mientras, afrontaba el proceso judicial por la causa Fútbol Para Todos. En esa causa por defraudación contra la administración pública, está procesado y embargado en dos instancias (la primera por la Jueza Servini de Cubría y la segunda por la Cámara Federal). En el proceso judicial se confirmaron irregularidades en el cobro de los cheques de la firma IVECO (que era el único sponsor). Además del pago en valores, se realizó una parte del pago en rodados. En una investigación encabezada por Servini de Cubría se confirmó que hubo camiones que fueron facturados por IVECO, pero nunca fueron entregados y que se encontraban en una de las plantas de la fábrica. La causa fue elevada a Juicio Oral. El Tribunal Oral Federal Nro 2 (integrado por Ricardo Basílico, Josá Michilini y Adrián Grunberg) tiene previsto el inicio del juicio el 24 de abril. La acusación estará a cargo del Fiscal Federal Miguel Ángel Osorio. Antes de fin de año podría haber una definición final sobre si la causa de Gabriel Mariotto fue una estafa que le costó miles de dólares al Estado Nacional.
Tras su fracaso en La Plata como segundo de Scioli, a quien debía controlar y en lo posible desbancar (terminó acompañándolo en todo momento, lo que le valió el enojo de CFK y el núcleo más duro de los K), Mariotto se quedó sin armas ni soldados en la política. Ni siquiera en su terruño, Lomas de Zamora, pudo lograr tener concejalías. Mucho menos en otros distritos bonaerenses o provincias del interior. Tras su salida del ejecutivo bonaerense, marginado.
Quienes formaron parte de su núcleo de colaboradores lo definen como un antisistema. Haciendo un breve repaso por sus redes sociales, además de las fotos con Esteche, Sala o Boudou, uno se puede topar con críticas a Cristina o La Cámpora y ataques a Alberto Fernández, Mauricio Macri, María Eugenia Vidal o Javier Milei por partes iguales. A esto se le suma un fuerte enfrentamiento con Axel Kicillof, quien es el funcionario de su signo político con el cargo de mayor rango en la actualidad.
En estos años, encontró un refugio en la política puntana. Fue un hombre de confianza de Alberto Rodríguez Saa, el anterior gobernador, quien puso a un delfín suyo en las elecciones de octubre pasado y perdió rotundamente a manos de Claudio Poggi, quien era apoyado por el hermano de Alberto, Adolfo. En el entorno de Alberto no fueron pocos los asesores y funcionarios que señalaron a la intromisión de Gabriel Mariotto como una de las causas más importantes de la derrota electoral del ex oficialismo puntano, luego de 40 años de dominio absoluto en las elecciones de la provincia.
Mariotto ya participó de la gestión del club. Fue entre 2015 y 2016, cuando siendo vicepresidente renunció de un día para el otro mediante un twett. Quienes lo conocen y estaban con él la noche en la que decidió abandonar el cargo, contaron que estaba asustado: temía irse al descenso y que la gente lo repudie e insulte. Eso hizo que los oficialistas no lo perdonen y lo consideren temeroso y de no saber cómo bancarse las malas.
Tras esa experiencia dirigencial, en 2021 intentó volver al ruedo. Se presentó como uno de los candidatos opositores al actual oficialismo encabezado por Eduardo Spinosa. El fracaso, fue rotundo. La lista oficialista alcanzó una nueva victoria (gobiernan desde 2012) y Mariotto no obtuvo ni siquiera la minoría. Con el porcentaje logrado en los votos, no pudo colocar ni un vocal en Comisión Directiva. Tras eso, profundizó su enfrentamiento con el actual presidente del Taladro.
Pasados los comicios en 2021, este año se vuelve a votar en Banfield. Y Mariotto, ni lento ni perezoso, ya salió a la cancha. Luego de una de las derrotas del equipo de Julio Falcioni en el inicio de la Copa de la Liga, el propio ex vicegobernador salió a pedir el adelantamiento de los comicios y la renuncia de toda la CD. Lo hizo mediante un posteo en la red social X lo que le valió el repudio de varios hinchas, quienes aún sin ser partidarios o militantes oficialistas le mostraron su descontento para con su figura. En la siguiente derrota, fue su hijo Matías quien repitió el camino, pero con igual resultado: aunque en menor medida, el rechazo de los socios de Banfield a sus figuras se hizo notar.
Un punto a destacar es la nula relación que tiene con Claudio Tapia. Totalmente distanciado de las autoridades de AFA, Mariotto no tendría chance de poder recomponer los vínculos que supo tener en los años dorados de Fútbol para Todos.
Sin poder ingresar en Banfield, los Mariotto saciaron sus ganas de estar en contacto con el mundo del futbol con su fluida relación con el Grupo Pini. Se trata de un grupo encabezado por los hermanos Ricardo y Sebastián Pini, quienes otrora fueron empleados de Christian Bragarnik. De larga trayectoria en el fútbol chileno, los Pini tuvieron participación en diversos clubes. Estuvieron en Rangers, compraron Unión La Calera y ahora encabezan Audax Italiano. Comprobando esta relación, Matías Mariotto trabajó durante un semestre en 2023 en Unión La Calera como Gerente Deportivo. Y ahora, el DT de los ‘Itálicos’ es Walter Erviti. A su vez, Erviti y Mariotto compartieron Cuerpo Técnico en Atlanta, cuando el ex 10 de Boca, Banfield, San Lorenzo e Independiente, fue DT y Mariotto hijo, su principal colaborador. Estas cuestiones laborales del menor de los Mariotto y de Erviti despiertan críticas en la masa societaria de Banfield, ya que alternan sus fugaces apariciones en la política del club con sus menesteres profesionales en el fútbol trasandino. ¿Anhelan ser dirigentes del club del sur o sólo se interesan por su política cuando no tienen tareas asignadas por los Pini?
Mariotto intentará lograr en Banfield lo que no pudo hacer en la política, aprovechando el mal arranque del equipo de Falcioni y especulando con que al club le vaya mal para tener un rédito personal.